San Miguel de Allende es uno de los destinos más trendy para pasar el fin de semana, pues además de ubicarse a solo cuatro horas de la CDMX, tiene una espectacular oferta de hoteles, restaurantes, bares, boutiques y galerías . Si bien es cierto que en los últimos años, la gentrificación se ha hecho cada vez más visible, no por esto la ciudad ha perdido su autenticidad y su enorme valor cultural —al grado que la UNESCO la ha designado como Patrimonio de la Humanidad—. Para honrar las raíces más profundas del destino, Pirules Garden Kitchen se suma a la oferta gastronómica de San Miguel de Allende como un nuevo restaurante de cocina de concepto ‘del campo a la mesa’ donde las cosechas locales dictan el curso de la cocina.
Un rincón mágico en Rosewood San Miguel de Allende
Además de su enfoque auténtico y autoconsciente, Pirules Garden Kitchen ofrece una ubicación realmente única dentro del hotel Rosewood San Miguel de Allende, el cual ha sido un referente de lujo y sofisticación en el destino desde hace más de una década. Ubicado al fondo de la propiedad, junto a un enorme pirul bastante protagónico, el restaurante da la bienvenida tanto a huéspedes del hotel como a locales o visitantes externos —otra gran ventaja: Pirules tiene su propio estacionamiento y no tendrás que entrar al Centro Histórico en los días de más tráfico—.
El interiorismo Pirules corrió a cargo del estudio Cuaik Arquitectos, quienes pusieron un énfasis especial en esa sensación desenfadada y acogedora de las cabañas en medio del campo, propiciando una conexión con el entorno natural que rodea el restaurante. Además, el uso de materiales locales, así como obras y piezas de artistas y artesanos mexicanos refuerza la filosofía A Sense of Place de Rosewood, la cual busca conectar con la identidad de cada destino. El restaurante Pirules Garden Kitchen cuenta con varios puntos que sencillamente cautivan la atención, desde el gran árbol a la entrada —cuyas hojas dan sombra a la terraza—, pasando por la vistosa barra que enmarca la famosa Parroquia de San Miguel, hasta llegar a la cocina abierta con el horno y las brasas al rojo vivo.
Cocina de autor y técnicas ancestrales
Si bien Rosewood San Miguel de Allende recibe con orgullo y entusiasmo al reconocido chef mexicano Odín Rocha, esta no es la primera vez que el chef camina por las cocinas del hotel. De hecho, él mismo vivió los años en los que el hotel se convirtió en un referente culinario del destino, solo que, aquella vez, como cocinero y no como chef ejecutivo de su propio restaurante. Después de captar la atención de los reflectores del mundo gastronómico mientras dirigía el restaurante Mezcal del hotel Montage Los Cabos y de trabajar bajo la tutela del chef Mauro Colagreco en el restaurante Mirazur en Francia —tres estrellas y una estrella verde Michelin—, el chef Odin Rocha regresa a San Miguel de Allende con aún más experiencia y entusiasmo para diseñar la identidad y dirigir la cocina del restaurante Pirules Garden Kitchen bajo una óptica de sostenibilidad integral que celebre los ingredientes mexicanos, los campos de Guanajuato, las técnicas ancestrales y la creatividad contemporánea.
En cuanto a la barra, vale la pena destacar que el menú de coctelería de autor de Pirules corre a cargo de la bartender brasileña Ana Paula Ulrich, quien trabajó en Rosewood Sao Paulo y, posteriormente, en el bar Hanky Panky en CDMX, reconocido como uno de los mejores Norte América. Estos tragos se caracterizan por el uso de técnicas innovadoras e ingredientes locales para crear bebidas frescas y con mucha personalidad, como Desierto —tequila, xoconostle confitado, limón y vermouth blanco— o Lavanda —vodka, licor galliano l’autentico, papaya, cordial de lavanda y agua mineral—.
Productores locales: la raíz de Pirules Garden Kitchen
Basándose en un enfoque de sostenibilidad integral, los productores locales son la médula espinal de Pirules. Para el chef Odín Rocha era importante que el restaurante trabajara de la mano con proyectos sustentables que no solo cumplieran con los más altos estándares de calidad, sino que además contribuyeran también a las comunidades y los campos nacionales.
La gran mayoría de los insumos provienen de iniciativas como La Factoría —una granja lechera 100% de libre pastoreo—, Traspatio —la cual apoya a mujeres locales en la crianza y distribución de pollos—, Comepesca —una organización dedicada al fomento de la pesca sustentable— y Vía Orgánica —un rancho a solo unos kilómetros de San Miguel de Allende que promueve las prácticas sustentables y el comercio justo—. Así, el restaurante Pirules tiende un puente entre sus comensales y todos estos proyectos que benefician directamente a la comunidad local.
El menú de Pirules Garden Kitchen
Hace poco, tuvimos la oportunidad de conocer Pirules, y debemos decir que es una experiencia que definitivamente vale la pena tener contemplada la próxima vez que visites San Miguel de Allende —o que incluso podría ser el pretexto ideal para una escapada al destino—. El menú se presta bien para pedir al centro y compartir. Empezamos con unas Endivias al carbón con queso y mayonesa de cenizas, seguido de unas Sardinas en conserva —cada mordida es una explosión de sabor y textura increíble—, así como una Ensalada de trucha salmonada del Lago de Pátzcuaro.
En cuanto a los platos fuertes, el New York Wagyu Queretano llamó nuestra atención no solo por su cocción perfecta y el exquisito balance con un puré de apionabo y nuez de macadamia, sino también por el hecho de que esta carne, si bien no cuenta con un certificado —sencillamente porque México no es un país certificador— cuenta con todas las características de calidad del Wagyu certificado. Por su parte, el Pork Belly con pistache, quelites del huerto y mole verde es otra delicia que no vas a compartir. Para quienes llevan una dieta libre de proteína animal, la Birria de vegetales de temporada se sirve con tortillas hechas a mano y no tiene nada que pedirle a la birria de borrego.
¡Coman, disfruten y compartan!
Sitio Web: rosewoodhotels.com