La CDMX lo tiene todo, y eso ya no sorprende a nadie. Hay lugares para cada cada plan y cada estado de ánimo. Aún cuando el antojo es muy específico, digamos, un martini perfectamente preparado, un negroni bien balanceado o una exclusiva copa de champán, la ciudad lo tiene para ti: El Tigrillo, un bar íntimo en la colonia Roma que acaba de darle un giro a su carta para enfocarse en estos tres clásicos. Con esta renovación, el Tigrillo es una carta de amor a la coctelería tradicional. Aquí se toman muy en serio lo que hacen: tragos bien hechos con ingredientes de alta calidad y una precisión que asegura el equilibrio en los sabores. Tú solo tienes que sentarte y darle gusto a tu antojo.
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El Tigrillo: pasión por los clásicos en un rincón de la Roma
¿Por qué estos clásicos de la coctelería? ‘Porque simplemente está bien padre tomar una buena champaña, un buen martini y un buen negroni donde cada ingrediente se note’, nos contó Daniela D’Acosta, socia y directora de bebidas de El Tigrillo. Hija de un viticultor, Dani creció rodeada de excelentes licores, así que la selección está en manos expertas. Para esta nueva etapa de El Tigrillo, eligió productos que realmente destacan por sí solos, donde el licor es el protagonista y todo lo demás es acompañamiento. Cabe mencionar que el Tigrillo es un proyecto ‘hijo’ de El Tigre Silencioso, que está justo a un alado, pero a diferencia de éste, es un espacio más íntimo, sencillo y relajado, pensado para quienes buscan una noche tranquila pero con un buen cóctel. Algo para relajarte después del trabajo y cerrar el día contento. El lugar es pequeño, con una mesa larga y capacidad para unas 12 personas máximo, así que la intimidad y tranquilidad están más que garantizadas.
Martinis, negronis y champán, los protagonistas de la carta
Al enfocarse en estos tres clásicos de la coctelería, el menú de El Tigrillo es sencillo, pero decidirse no es tan fácil. Cada trago está afinado con precisión, sin añadidos innecesarios. Todas las champañas de la carta son brut nature, hechas con métodos tradicionales, lo que significa que son vinos espumosos secos o muy secos, con poca azúcar. Podrás disfrutar etiquetas como Drappier, Ruppert Leroy, Guenin, A. Margaine y Aurore Casanova, además de espumosos invitados como Casa de Piedra de Valle de Guadalupe, Domaine Ansen de Francia y Raventós i Blanc de Cataluña.
Martiní de algas y Negroni de la casa, las sorpresas de El Tigrillo
En cuanto a los martinis, hay opciones clásicas como el tradicional, el extra seco y el espresso con café, pero también propuestas más atrevidas como el Martini de Algas, con sake, salmuera de alga y wakame. Nosotros probamos el Martini de Bergamota, una verdadera delicia, y el Martini Largo, que mezcla vermut, banquero fino, gin, salmuera y tónica para un trago súper fresco y un poco más dulce que los demás. Los negronis respetan su estructura original, con variaciones sutiles que resaltan la personalidad del gin o el vermut. Entre ellos están el clásico Negroni Toto, con Carpano Bitter y Artica Fórmula; el Americano Black, con cold brew, Quintinye Royal, bitter rosso y gin; y el que más nos gustó fue el Negroni Sbagliato, un original de la casa hecho en bodega con vino espumoso natural y que solo solo podrás probar aquí. Una carta sencilla, sí, pero con cócteles que se disfrutan en cada sorbo.
Bocadillos para acompañar tu copa
Aunque los cócteles son el centro de atención, El Tigrillo también ofrece bocadillos refinados para acompañar tu copa. Algunas opciones incluyen Ikura, hueva de trucha y caviar con complementos como crema ácida, cebollín, chips de papa, crema de eneldo y huevitos de codorniz; ostiones de cultivo con mignonette de vino blanco; tartar de atún; chilitos toreados con salsa bruja de la casa; y, por supuesto, las clásicas aceitunas y queso Ramonetti. Si buscas algo más sustancioso, hay opciones como la tostada de trucha con maíz azul o la slider de wagyu con pan brioche y mayonesa de trufa negra, ambas deliciosas. El Tigrillo es un plan completamente nocturno, abierto de jueves a domingo de 6:00 p.m. a 2:00 a.m. Los tragos y bocadillos se acompañan con buena música y la plática con amigos que podría extenderse hasta tarde. Sin duda, un lugar ideal para cerrar el día con buen sabor y bien acompañado.
Dirección: Colima 159-Local 2D, Roma Norte, Cuauhtémoc
Página: @el_tigrillo__
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