Así como la gente va a la iglesia a escuchar sobre lo divino, en el México de los años 40 surgió la necesidad de un espacio donde se pudiera ir a escuchar las ideas que estaban dando forma al mundo. Un lugar para hablar de historia, política, lengua, arte… todo eso que alimenta el pensamiento de una época. Así nació el Colegio Nacional: no como un colegio común con salones y alumnos, sino como un espacio donde científicos, artistas y literatos compartieran su saber a todo aquel que quisiera escuchar. Fue creado en 1943 por decreto del presidente Manuel Ávila Camacho y desde entonces se ha mantenido fiel a su lema: Libertad por el saber.


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El edificio histórico del El Colegio Nacional
El Colegio Nacional se encuentra sobre la calle Donceles, en pleno Centro Histórico de la CDMX. Probablemente ya pasaste frente a su fachada sin saber que alberga una joya arquitectónica con siglos de historia. El edificio que ocupa se construyó en 1754 para ser el Colegio de la Enseñanza de la Antigua Compañía de María. CUenta con tres niveles y en todos ellos está plasmado la arquitectura barroca novohispana. A lo largo del tiempo, el inmueble ha tenido muchos usos: fue sede de la Suprema Corte de Justicia y también albergó una escuela para ciegos. Pero desde su inauguración, se convirtió en la sede permanente de El Colegio Nacional.


Las mentes brillantes detrás del Colegio Nacional
Otro dato interesante sobre la creación de este colegio son los nombres que participaron desde el inicio: figuras como Alfonso Reyes, José Vasconcelos, José Clemente Orozco y Diego Rivera. A lo largo del tiempo, también han sido miembros personajes como Octavio Paz, Carlos Fuentes, Gabriel García Márquez, Luis Buñuel, Juan Villoro o Cristina Rivera Garza. Como ves, aquí convergen disciplinas tan distintas como la física, la medicina, la historia, la literatura o el arte. Y como ya decíamos, no es una escuela tradicional con salones, materias o grados académicos. Es más bien un foro abierto y gratuito donde el conocimiento se comparte con todos. Los miembros son expertos en sus campos y su tarea no es dar clases, sino divulgar sus investigaciones y descubrimientos.



Todo lo que puedes hacer (y descubrir) en El Colegio Nacional
Cualquier persona puede visitar El Colegio Nacional y asistir a sus eventos sin registrarse, pagar o cumplir con algún requisito. La institución organiza conferencias, seminarios, mesas redondas, conciertos y exposiciones. Pero incluso si no hay ningún evento, vale la pena entrar y conocer la Biblioteca del Colegio Nacional, con cerca de 30 mil ejemplares repartidos en distintas colecciones. Con títulos sobre historia de México y literatura de distintas épocas, las obras escritas por todos los colegiados, y un fondo reservado con libros antiguos y raros. También cuenta con una hemeroteca, una mediateca y un archivo histórico. Para rematar, en el primer piso hay una cafetería donde puedes leer mientras disfrutas un café o un desayuno. El recinto abre de lunes a sábado, de 10:30 a 18:30 horas. Consulta su cartelera en redes sociales y date una vuelta la próxima vez que andes por el Centro.
Dirección: Donceles 104, Centro Histórico de la CDMX, Cuauhtémoc
Página: @elcolegionacional


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