Desde su apertura en la colonia Roma, El Tigre Silencioso se definió como una cocina norteña, honesta y poderosa. Hoy acaba de celebrar tres años cumpliendo esa promesa. El Tigre nació como un sueño de amigos originarios de Baja California, entre ellos el reconocido chef David Castro Hussong, –quien en 2023 encabezó el primer lugar de los Latin America’s 50 Best Restaurants–, y uno de sus mejores amigos, el enólogo Lucas D’Acosta. Ambos celebran ver la cantina ecléctica que imaginaron creciendo y creando. Y para conmemorar la ocasión, –y sumarle una raya más al tigre–, lanzaron una trilogía de vinos exclusivos de El Tigre Silencioso, disponibles solo aquí y fieles a la misma filosofía que guía su cocina: atención, identidad y cariño por el trabajo bien hecho.


Te puede interesar: El Tigrillo: el bar íntimo en la Roma para disfrutar un buen martini, negroni y champán
Tres vinos para celebrar al Tigre Silencioso
Estos vinos nacieron en Vinícola Aborigen, una bodega con sede en Ensenada que se distingue por su espíritu experimental y su compromiso con crear ‘vinos emocionales’ que realmente conecten con quien los bebe. Desde el inicio, fueron concebidos para maridar con los sabores californianos que distinguen a El Tigre, y todos son naturales, sin aditivos. Tuvimos la suerte de conocer esta primicia y, honestamente, no hubo mejor manera de celebrar su aniversario. Cada vino se sirvió junto a algunos de los platillos más emblemáticos y queridos del menú en estos tres años. Empezamos con el Blanco del Tigre, una mezcla de Chenin Blanc, Chardonnay y Ugni Blanc, fermentado en barricas durante cuatro meses: seco, amable, con buena acidez, ideal para platos sutiles. Lo acompañamos con un ceviche de kampachi y una ensalada de tomates.



El maridaje perfecto para acompañar los platos favoritos de El Tigre
El segundo vino es el Naranja del Tigre, un palomino con dos semanas de maceración y remontado oxidativo: es especiado, con estructura y mucha personalidad. Ideal para platos de sabor intenso como el taco de camarón, que definitivamente fue nuestro favorito; y el Fideo de abulón con crema de ostión ahumado y tocino, que deja ver la frescura de los pescados que se sirven aquí. El cierre fue con el Tinto del Tigre, un grenache del Valle de San Vicente, sin barrica y fermentado en acero inoxidable: es frutal, fresco y ligero, servido un poco más frío para potenciar su carácter. Va de maravilla con carnitas, costillas o tacos con salsas especiadas; nosotras lo acompañamos con la costilla corta y la milanesa de calamar. Ambos llegaron a la mesa con salsas y mayonesa de la casa. Cada plato y cada trago es una verdadera gozada.



¡Un brindis por el Tigre Silencioso!
Para rematar con un gran final, llegaron dos postres de la chef repostera de El Tigre Silencioso, Maribel Aldaco, –reconocida como la Mejor Chef Repostera de América Latina en 2023–. Una crema de cacahuate con chocolate y los higos con mascarpone, miel y crumble, dulces y frescos, también dos clásicos de la casa. Con todo, esta trilogía de vinos inaugura un nuevo capítulo en la historia de El Tigre, y sin duda volveremos. Incluso si no llegas con mucha hambre, es un buen lugar para relajarte con entradas como la carne seca, las aceitunas con queso Ramonetti o las croquetas de pescado. También tienen una selección de destilados así como el Negroni Sbagliato, original de la casa. Todo esto, dentro de una hermosa casona del siglo XX remodelada con elegancia y comodidad. No hay forma de no pasarla bien. ¡Larga vida al Tigre Silencioso!



Dirección: Colima 159-int 1 a, Roma Norte, Cuauhtémoc
Página: @el.tigre.silencioso
¡Come, disfruta y comparte!