Los fanáticos de la aventura, los paisajes naturales, los lugares bonitos e instagrameables y los recorridos gastronómicos y llenos de historia encontrarán en Puebla una gran opción para saciar sus ganas de viajar, con un destino cercano a la CDMX, pero con muchos atractivos, tanto naturales como culturales. De esta manera, si eres fanático de los lugares en medio de la naturaleza, con cuerpos de agua y un ambiente mágico, a continuación te presentamos algunas cascadas en Puebla que no solo se destacan por estar a menos de tres horas de la capital del país, sino que también son realmente espectaculares. Tienes que visitarlas.
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Cascada San Pedro Atlixco
Si de cascadas en Puebla se trata, la de San Pedro Atlixco es un must, pues con sus más de 15 metros de altura y su encantador paisaje de pinos y encinos conquista a los viajeros más exigentes. Además, se encuentra a solo dos horas y media de la CDMX, lo que la hace realmente accesible para los capitalinos.
Cascadas Tulimán
Otras cascadas imperdibles en el estado de Puebla son las de Tulimán. Localizadas en el municipio de Zacatlán, a tan solo dos horas y 40 minutos de la CDMX, estas bellas cascadas unidas, con una caída de aproximadamente 300 metros, se caracterizan por su majestuosidad y por estar rodeadas de un encantador paisaje verde. Lo mejor de esta bella formación natural es que se encuentra en un complejo ecoturístico donde además de apreciar la cascada, los visitantes podrán hacer senderismo, visitar un árbol hueco de más de 35 metros de altura, apreciar la belleza de pozas y recorrer un circuito de tirolesas.
Cascada Salto de Quetzalapan
A tan solo 30 minutos de las Cascadas Tulimán, se encuentra esta impresionante cascada de aproximadamente 100 metros de altura, reconocida por ser una de las más altas del estado. Asimismo, esta gran caída de agua es famosa porque en el pasado fue la fuente principal de energía eléctrica para las poblaciones de Chignahuapan, Zacatlán y Aquixtla, hasta que a principios de los años 80 dejó de funcionar de esta manera por los altos costos de operación. Actualmente, solo está abierta con fines recreativos, para aquellos viajeros que deseen observar la belleza de la naturaleza en su máxima expresión.
Cascadas de Ahuehuetla
Para los amantes de los lugares secretos y escondidos, estas cascadas en Puebla son perfectas, pues se localizan en el pueblo de San Agustín Ahuehuetla y la única forma de acceder a ellas es a pie o en bicicleta, por lo que conservan cierta magia y encanto. Lo mejor es que en el lugar podrás refrescarte un poco en las pozas, por lo que no dudes en llevar tu traje de baño, el cual también te será útil si deseas visitar alguno de los balnearios de la zona, como el de Atotonilco, localizado a 30 minutos.
Cascada de Puxtla
Si no tienes inconveniente en alejarte un poco más de tres horas de la CDMX –aproximadamente 30 minutos más– podrás visitar una de las cascadas más hermosas y únicas de Puebla. Se trata de Puxtla, en el municipio de Tlatlauquitepec, una preciosa cascada de 80 metros, escondida en medio de la selva, la cual ofrece vistas espectaculares. En este lugar además de caminar y apreciar la flora y fauna de la mano de expertos, como los de Recorridos Cascada de Puxtla, podrás refrescarte con un chapuzón al final de la experiencia.
Cascadas de Aconco
Más o menos a la misma distancia que la de Puxtla, se encuentran estas bellas cascadas en Puebla, las cuales se caracterizan porque están en un desarrollo ecoturístico que, además de recorridos, ofrece preciosas cabañas para pasar la noche. En el lugar puedes hacer senderismo, recorridos en tirolesa, rápel, cabalgar y disfrutar de paisajes mágicos y encantadores que te enamoran con un solo vistazo.