Hidalgo es uno de los destinos mexicanos – y cercanos a la CDMX – que destaca por su historia indígena, sus importantes vestigios arqueológicos, su oferta cultural llena de tradición y sus hermosos paisajes naturales. A cuatro horas de la CDMX se encuentra una de las lagunas más bellas y de misticismo legendario: la laguna de Atezca. Si quieres conocer más sobre este paraíso de la naturaleza y por qué no puedes dejar de conocerlo durante tu próxima visita a Hidalgo, sigue leyendo.
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La laguna de Atezca es un hermoso destino natural localizado en el municipio de Molango de Escamilla, al norte del territorio hidalguense y aproximadamente a cuatro horas de distancia de la CDMX. Su nombre ‘Atezca’ proviene del náhuatl ātezcatl – que significa ‘espejo de agua’ -, también hace referencia al poblado de Azteca que se ubica en la orilla oeste del lago.
Por ser un sitio poco conocido en Hidalgo, la laguna de Atezca será el escenario perfecto para cuando necesites una escapada pacífica y de verdadera conexión con la naturaleza. Se encuentra rodeada de la riqueza boscosa de la Sierra Madre Oriental, alimentada por cinco riachuelos intermitentes y con un clima templado que hará de cualquier visita sumamente agradable.
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La laguna de Atezca presume de una historia legendaria que data bastantes años atrás. Se dice que un pescador solía frecuentar el sitio en compañía de su hermosa hija, hasta que un día ésta conoció a un caballero de quien se enamoró perdidamente, sólo para enfrentar el rechazo de su padre ante la posible relación. Triste y desolada, la joven intentó nadar hasta la isla localizada al centro de la laguna, pero nadie la volvió a ver otra vez. Locatarios dicen que se convirtió en sirena y, hasta la fecha, permanece oculta dentro de la laguna para capturar hombres de su agrado y llevarlos hasta las profundidades.
El acceso a la laguna de Atezca es completamente gratuito, una vez en la zona encontrarás estacionamiento, área de camping, restaurante y vestidores. Para hacer de tu visita inolvidable, te recomendamos nadar en sus aguas pacíficas, dar un paseo en lancha o practicar pesca deportiva – en la laguna habita variedad de especies como mojarra, tilapia y lobina negra -. El sitio cuenta también con alojamientos en sus alrededores próximos, así como en el municipio de Molango a tan sólo seis kilómetros de distancia, serán una buena alternativa si buscas un hospedaje más cómodo.