Oaxaca es un destino que tiene de todo: riqueza histórica, tradiciones vigentes, construcciones coloniales, cultura gastronómica y alojamientos de ensueño. De estos últimos existen opciones para cualquier gusto y necesidad, desde hoteles boutique de atmósfera bohemia y local, hasta hospedajes enclavados en medio de la naturaleza y de maravillosa armonía arquitectónica. Recién abrió sus puertas Terrestre, un hermoso hotel escondido entre jardines de orquídeas en Puerto Escondido, con el diseño sublime característico de Grupo Habita.
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Grupo Habita es un desarrollo hotelero con algunos de los alojamientos más bonitos de México, compartiendo bellísimos espacios de arquitectura armoniosa, diseño interior sublime y conexión auténtica con su entorno natural. Éstos han sido premiados y reconocidos a nivel internacional en repetidas ocasiones, gracias a que ofrecen una experiencia de descanso única y destacable por su carácter artístico. Terrestre es su proyecto más reciente.
Más que un hotel, Terrestre ofrece una experiencia multisensorial, de reconexión personal y responsabilidad ambiental. Se localiza entre el océano y las montañas de Puerto Escondido, oculto entre jardines de orquídeas y ofreciendo un escape pacífico y de simplicidad sofisticada; busca llevar el turismo sustentable al siguiente nivel, ya que trabaja 100% con energía solar e incita a sus huéspedes a desconectarse completamente de sus dispositivos electrónicos, para disfrutar una estancia de conexión auténtica con la naturaleza.
El proyecto corrió a cargo del Taller de Arquitectura X (TAX), liderado por el arquitecto Alberto Kalach – encargado también de Casona Sforza y Hotel Escondido en Oaxaca – y ofreciendo un maravilloso espacio conformado por 14 villas privadas, restaurante al aire libre, área comunal de albercas circulares donde disfrutar tratamientos relajantes, y un sorprendente spa hexagonal.
Cada una de las villas se creó a partir de una paleta de colores terrestre, con decoración en texturas naturales – madera, ladrillo, concreto, arena – y mueblería del arquitecto mexicano Oscar Hagerman. El resultado es una interacción equilibrada entre naturaleza y arquitectura, estableciendo un diálogo respetuoso con su entorno orgánico, mismo que participa inherentemente en el diseño del hotel.
Terrestre cuenta también con un restaurante de especialidades mexicanas y mediterráneas, elaboradas a partir de producto local y con un menú de bebidas destacable – cócteles refrescantes, vinos selectos y opciones libres de alcohol -. Visitarlo será disfrutar un hospedaje privado de bellísimos panoramas hacia la jungla oaxaqueña, así como una experiencia de inmersión natural y turismo sustentable.