México es un país lleno de bellezas naturales que nunca dejarán de sorprendernos, fauna y flora que solamente nosotros podemos disfrutar y que le han ganado a México, un reconocimiento a nivel mundial. Sin embargo, existe fauna y flora en peligro de extinción que vale la pena cuidar y proteger, tal es el caso de la chirinola, el único cactus que camina y que crece únicamente en las zonas áridas de Baja California Sur.
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Esta especie endémica del estado de Baja California Sur, es el único cactus que no crece erecto. Por lo cual al crecer sobre el suelo, es capaz de desplazarse de lugar. Su forma alargada y grisácea se la debe a sus espinas, las cuales pueden llegar a causar mucho dolor si llegan a tener contacto con la piel. Además, al ser una especie en peligro de extinción está prohibido tocarlos.
La Chrinola es un cactus de floración nocturna, en el cual los hijuelos nacen en forma de ramificaciones y así al final terminan separándose de la planta madre. Estos hijuelos llegan a medir desde cuatro hasta ocho metros de largo. Por lo general es una especie de con un diámetro pequeño, casi ninguna supera los 15 cm. Sin embargo, de largo se han encontrado especies de hasta 15 metros.
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Entre la isla de Magdalena y Santa Margarita se encuentra la bahía que es el corazón de esta especie; barreras arenosas protegidas por el océano Pacífico que se encuentran dentro del estado de Baja California Sur. Este lugar también es hogar del avistamiento de ballena gris, y cuenta con uno de los ecosistemas marinos más ricos del mundo. También es hogar de más de 80 especies de aves migratorias que año con año, buscan sus cálidas playas.
Algo que el gobierno está implementando es el rescate de la Chirinola, ya que está especie se llega a traficar debido a su alto valor. Es por eso que aún encontrándose en una reserva natural, esta especie es una de las más explotadas del país. Si quieres conocer esta especie puedes visitar algunas de las reservas. No olvides seguir todas las normas de seguridad.
