El turismo también es una forma maravillosa de aprender más sobre la historia religiosa y espiritual de cada destino, así como brindar un entendimiento sensible a sucesos importantes de su respectiva creencia. Uno de los lugares religiosos más especiales de todo el mundo se encuentra en Turquía, conocida como la última casa habitada por la Virgen María y actualmente declarada como un santuario de la Iglesia Católica Romana. Aquí te contamos más sobre ella.
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La Virgen María es uno de los personajes religiosos más importantes de todo el mundo, una mujer judía madre de Jesús de Nazaret, clave en la historia de salvación y resurrección de Jesucristo. Se dice que, para huir de las persecuciones en Jesusalén –después de la muerte de Jesucristo–, San Juan el Apóstol se dio a la tarea de ocultarla Éfeso –Turquía–, donde viviría por muchos años y hasta su fallecimiento. Esta versión es más aceptada por la iglesia cristiana ortodoxa.
Fue a principios del siglo XIX cuando la beata Anna Catalina Emmerick tuvo una visión sobre los últimos días de vida de la Virgen María, describiéndola dentro de un paisaje nunca antes visto y dejando registro para que futuros misioneros pudieran encontrarla, relato que se publicó posteriormente por el escritor Clemens Brentano. Fue hasta 1891 que sacerdotes lazaristas dieron con la construcción, que tuvo que pasar por diversas consultas para convertirse en un ‘lugar santo’ en 1950.
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La Casa de la Virgen María se ubica a las afueras de Éfeso, un importante centro cultural y religioso que actualmente forma parte de Turquía. El edificio es una pequeña iglesia bizantina probablemente construida dentro de un edificio más antiguo, con un trabajo de restauración que permite distinguir los restos originales de su estructura. Sin duda alguna, entre los puntos de interés más importantes dentro del turismo religioso.
El acceso a la Casa de la Virgen María se encuentra abierto para el público en general, siempre y cuando se acuda con una actitud de respeto hacia su carácter simbólico y espiritual. La forma más fácil de acudir es mediante una excursión especial, que también permitirá escuchar una historia más detallada sobre el lugar, así como disfrutar despreocupadamente de la visita.