A tan solo una hora de la CDMX, se encuentra una de las destilerías más importantes de México, Abasolo. La primera destilería en elaborar un whisky 100% mexicano a base de maíz nixtamalizado. Este lugar fue diseñado por el arquitecto Lorenzo Álvarez, quien fue el encargado de crear un espacio industrial, que retoma la esencia de Jilotepec –un lugar de gran tradición agrícola–.
TE PUEDE INTERESAR: Los 5 bares speakeasy más raros (pero con más personalidad) de la CDMX
Abasolo es un whisky mexicano que realza los sabores del maíz ancestral a través de la nixtamalización –un método de cocción prehispánica en agua con cal– algo que hace único a este whisky. Estos procesos de cocción y fermentación hace que Abasolo sea un destilado con notas muy marcadas a miel, vainilla, maíz tostado, té negro y cuero. Además de ser muy suave en boca, tanto en la parte alcohólica como aromática.
La destilería se encuentra en una nave con una estructura de crujía fabril de acero, la cual permite una vista de 180 grados de toda la fábrica. Además la forma permite una ventilación natural y un corredor de luz que ahorra energía. Cuenta con un patio enorme para eventos y una zona de visitas con terraza desde la cual se observa toda la fábrica.
TE PUEDE INTERESAR: Este hotel tiene un picnic secreto en un apiario al sur de la ciudad
Esta destilería es una de las más bonitas y cercanas a la ciudad, además recientemente ganó un premio de diseño y arquitectura. Esto gracias a su diseño sustentable que respeta las áreas naturales y los materiales de la zona. Siguiendo la filosofía de la sustentabilidad y el respeto al medio ambiente Abasolo utiliza maíz cacahuazintle de productores locales de las zonas montañosas del Estado de México.
En el proceso de elaboración del whisky de la destilería Abasolo, primero se seca el maíz en el campo, para después ser desgranado y nixtamalizado, después el maíz se seca con aire caliente y se muele. Esta harina es con la que se elabora Abasolo.
