Uno de los lugares más especiales e imprescindibles de Huasca de Ocampo, Pueblo Mágico, es la Hacienda San Miguel Regla, un sitio que te lleva de paseo al siglo XVIII. Esta antigua fábrica minera, con más de 300 años de historia, ha logrado conservar gran parte de sus construcciones originales, rodeadas de naturaleza y en un ambiente de completa tranquilidad. A solo un par de horas de la Ciudad de México, es la escapada perfecta para un fin de semana. Aunque hoy en día la hacienda funciona como hotel boutique, la buena noticia es que puedes visitarla sin necesidad de hospedarte, gracias a los recorridos guiados que ofrecen. Aquí te contamos todo lo que encontrarás para que no puedas resistirte a conocer una de las haciendas más bonitas de todo México.
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Hacienda San Miguel Regla, un viaje al siglo XVIII
La historia de este lugar comienza en 1746, cuando un español llamado Don Pedro Romero de Terreros y Ochoa, conocido como el Conde de Regla, construyó varias haciendas dedicadas a la producción de oro y plata. En otras palabras, esta hacienda fue creada para ser una fábrica de oro. Don Pedro explotó las minas de Pachuca y Real del Monte, y traía los minerales a sus haciendas para procesarlos y convertirlos en lingotes, que luego enviaba en barco desde Veracruz hasta España. Construyó tres haciendas, y una de ellas fue San Miguel Regla, que además de ser un centro de producción, también sirvió como su residencia. El Conde de Regla fue tan hábil en los negocios que fundó el Nacional Monte de Piedad, pues también se dedicó al préstamo de dinero y a la renta de tierras para cultivo. Tras su muerte, la hacienda pasó a manos de sus hijos, pero con la Revolución Mexicana muchas haciendas fueron saqueadas y destruidas. Afortunadamente, esta sobrevivió y más tarde fue adquirida por los ingleses, quienes incluso construyeron una capilla dentro de la propiedad.
De fábrica minera a un Hotel Boutique
Para convertirla en hotel, muchas partes tuvieron que reconstruirse y otras remodelarse, pero aún conserva muchos de sus muros de piedra originales. Está la capilla de estilo inglés, el casco principal, antiguos túneles, enormes bóvedas, calabozos y unos arcos de piedra que, se dice, el conde copió de los Arcos de Querétaro. En la entrada te recibe un jardín de ensueño atascado de árboles gigantescos, conocido como la Alameda, otra de las áreas que permanecen intactas. También encontrarás unos estanques que parecen lagos de agua cristalina porque son abastecidos con el agua de los manantiales de Huasca. Justo allí, en los estanques, es donde estaba la fábrica con los hornos donde se procesaban los minerales, ahora está inundado, pero aún se pueden ver restos de fierros y viejos aparatos de la época, así como un puente de piedra que cruza la zona y que es ideal para tomarte fotos increíbles.
Recorridos caracterizados
Como mencionamos antes, no es necesario hospedarse en el hotel para conocer los rincones de esta hermosa hacienda, ya que el lugar ofrece un recorrido muy entretenido que se siente casi como una obra de teatro. Los guías se visten como personajes de la época y figuras clave en la vida del conde. La historia es narrada por el fiel sirviente del conde, su esposa, un trabajador de las minas y una de sus tantas hijas, quienes se meten tan bien en sus papeles que hacen del recorrido una experiencia dinámica y divertida. Los tours duran alrededor de una hora y media, pero ojo, solo están disponibles los sábados y domingos a las 12, 2 y 4 de la tarde, con un costo de $150 por persona. Y la capilla inglesa del interior solo se abre los domingos para una misa, de 7 a 8 de la mañana.
Hospédate en una de las haciendas más bonitas cerca de la CDMX
Quedarse en la Hacienda San Miguel Regla tiene varias ventajas, como poder recorrer áreas exclusivas para huéspedes, tomarte todo el tiempo que quieras para fotos y disfrutar de las instalaciones. Por ejemplo, su alberca con vista a la barranca es impresionante, y las habitaciones, aunque conservan el encanto histórico, están equipadas con la comodidad contemporánea. Decoradas con detalles coloniales, balcones, camas confortables y chimeneas. Además, la hacienda cuenta con un restaurante, también abierto al público, donde sirven desayunos y comidas. Eso sí, tanto los recorridos como el hospedaje solo están disponibles los fines de semana, por lo que se recomienda reservar con anticipación.
Dirección: Av. Las Carreras S/N, San Miguel Regla, Huasca de Ocampo.
Página: sanmiguelregla.com
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