Uno de los mayores tesoros de Huasca de Ocampo son los Prismas Basálticos, esas impresionantes formaciones geológicas que decoran las paredes de una barranca. Tal vez ya los conoces o tienes ganas de visitarlos, pero si estás planeando el viaje, te contamos un secreto: justo a un lado de los prismas se encuentra la Hacienda Santa María Regla, una antigua hacienda con más de 300 años de historia que en su momento se dedicó a la producción de oro y plata. Por su ubicación privilegiada, esta hacienda ofrece una vista distinta y más privada de los prismas, una perspectiva que pocos conocen. Además de su arquitectura imponente y su historia fascinante, puedes recorrerla y disfrutar de un rincón único de Huasca. Lo mejor es que está a solo dos horas de la CDMX.
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La hacienda que impulsó la minería en Huasca de Ocampo
La Hacienda de Santa María Regla fue la primera en la región dedicada al beneficio de oro y plata. Se construyó entre 1760 y 1780 como residencia del primer conde de Regla, Pedro Romero de Terreros, un personaje clave en la historia minera de la zona. En su momento, funcionó como una hacienda de beneficio, es decir, un lugar donde se procesaban los minerales extraídos de las minas cercanas. No pasó mucho tiempo antes de que se convirtiera en una de las más importantes del llamado Imperio de Regla. Con el paso del tiempo, y especialmente a principios del siglo XIX, la hacienda, al igual que todo el imperio, fue perdiendo fuerza hasta quedar fuera de operación. Lo bueno es que, a pesar de los años, sigue conservando mucho de su estructura original: patios amplios, arcos de piedra, túneles, bóvedas, calabozos y hasta un pequeño lago que le añade un encanto especial.
Un lugar para hospedarte en Huasca con vista a los Prismas Basálticos
Hoy, esta histórica hacienda se ha transformado en un hotel rústico y bellísimo de estilo colonial. Tiene 51 habitaciones que, aunque modernas y cómodas, mantienen ese encanto clásico; algunas cuentan con chimenea, tina de baño o sauna privado. Entre las áreas comunes destacan una hermosa capilla, una alberca al aire libre rodeada de antiguos muros de piedra, y un jardín ideal para celebraciones especiales, con capacidad para hasta 600 personas. También tiene un restaurante de cocina mexicana tradicional que ofrece tanto servicio a la carta como buffet para desayunos y comidas. La hacienda está rodeada de un entorno boscoso con árboles frondosos que enmarcan paisajes espectaculares y realzan lo impresionante de la construcción. Eso sí, toma en cuenta que no hay señal de internet en el hotel, ya que la idea es desconectarte del mundo y disfrutar la tranquilidad del lugar.
Actividades para disfrutar la hacienda sin hospedarte
No te preocupes si no te hospedas ahí, igual puedes visitar la Hacienda Santa María Regla y recorrer sus impresionantes instalaciones, ya que ofrecen recorridos guiados donde puedes conocer sus secretos y su historia, incluyendo los túneles, laberintos y antiguos calabozos. Algunas noches incluso se organizan recorridos de leyendas con antorchas, personajes fantásticos, fogatas y hasta baile, lo que le añade un toque aún más mágico al lugar. Después del recorrido, vale muchísimo la pena tomar el sendero interno que lleva hasta la última cascada de los Prismas Basálticos. El trayecto, rodeado de naturaleza, termina en el Mirador Santa María Regla, desde donde se obtiene una vista espectacular. Ya sea que vayas por el día o decidas quedarte, no dejes de conocer esta hacienda llena de historia, misterio y vistas únicas a una de las maravillas naturales más bellas de Hidalgo.
Página: FB Hacienda Santa María Regla
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