Los amantes del vino y, sobre todo, de los vinos argentinos sabrán que las uvas Malbec producen de los mejores vinos tintos del mundo. Sin embargo, Trivento, una de las principales bodegas argentinas, decidió innovar al elaborar el primer White Malbec, el cual no solo se destaca por su acidez única, sino también por poseer unos taninos agradables, muy característicos de los vinos tintos.
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Trivento White Malbec es elaborado con uvas que provienen de Luján de Cuyo y del Valle de Uco, las cuales se cosechan aproximadamente 30 días antes en comparación con el Malbec tinto. Su cosecha temprana permite una menor graduación alcohólica y una acidez natural mucho más marcada.
Asimismo, este innovador vino es elaborado a través de una molienda suave para prevenir la pigmentación y lograr esos colores pajosos y cristalinos de los vinos blancos; su fermentación es en tanques de acero inoxidable por 15 días a una temperatura de 10ºC, posteriormente, el vino es filtrado, clarificado y estabilizado para su embotellamiento. Todo este proceso da como resultado un vino blanco de intensidad media con aromas a cereza y frambuesa que se combinan con notas de manzana verde y una marcada acidez en el paladar.
Para los amantes de la cultura enológica, un Malbec blanco suena como algo arriesgado y muy raro, no obstante, el resultado sorprenderá hasta los más exigentes, pues aunque es de reciente creación, la cosecha 2020 de Trivento White Malbec recibió un reconocimiento de 90 puntos otorgado por el crítico James Suckling quien enfatizó en sus notas aromáticas de durazno, mango fresco, limón y crema y aplaudió su acidez brillante y su final fresco y afrutado.
Además, la elaboración de este innovador vino trae consigo un programa de responsabilidad social, en el que parte de las ganancias son asignadas a becas anuales para que miles de argentinos puedan seguir estudiando. Estas acciones se remontan a 2018, cuando Trivento se convirtió en la primera bodega argentina en reportar metas concretas para tres Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.
Es así como Trivento decidió quitarle la piel —y el color— al Malbec para ofrecer un White Malbec con la misma identidad, pero con una nueva apariencia y notas más arriesgadas, pero agradables. Lo mejor de este nuevo vino es que gracias a sus innovadores sabores será una gran puerta de entrada para quienes no estén acostumbrados a esta bebida.
