Si has pasado frente a él, seguro te ha robado la mirada, y si aún no lo conoces, ahora tienes una excusa perfecta para visitar la colonia Santa María la Ribera. Hablamos del majestuoso edificio porfiriano que alberga el Museo de Geología, un lugar con 118 años de historia que, por su belleza y antigüedad, forma parte del patrimonio arquitectónico de la CDMX. Ubicado justo frente a la Alameda de Santa María, su imponente fachada de cantera, sus elegantes arcos y su escalinata de hierro te invitan a descubrir este verdadero tesoro, que no por nada es conocido como el Palacio de las Ciencias de la Tierra.
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El Museo de Geología y su legado arquitectónico
Este edificio fue diseñado con la idea de crear un Instituto Geológico Nacional, y fue el mismo Porfirio Díaz quien aprobó el proyecto y puso la primera piedra en 1906. Aunque hoy en día no es un instituto, sino un museo, nunca ha perdido su propósito original: resguardar colecciones científicas y difundir el conocimiento sobre las ciencias de la Tierra. Pero el edificio en sí es una obra de arte. Su fachada ecléctica combina detalles franceses típicos de la época y los fusiona con motivos prehispánicos. Al entrar, te recibe un vestíbulo con pisos de mosaico y una majestuosa escalinata de estilo Art Nouveau. También cuenta con una pequeña terraza rodeada de ocho columnas jónicas, y en ellas se pueden ver inscripciones que mencionan algunas de las principales ramas de las ciencias de la Tierra: Geología, Paleontología, Geotécnica, Química, Litología y Mineralogía. En su interior, aún se conservan diez lienzos pintados por Manuel Velasco, que completan el recorrido visual en este histórico lugar.
¿Qué verás en el Museo de Geología?
Por supuesto que un edificio de esta magnitud tenía que albergar una de las colecciones geológicas más importantes de México. Las más destacadas son la reconstrucción de un esqueleto de mamut y el primer dinosaurio encontrado, recolectado y restaurado en México por investigadores de la UNAM. También hay un lirio marino de 150 millones de años, un esqueleto de caballo de 10 mil años de antigüedad y un dinosaurio pico de pato de más de 65 millones de años. Además, el lugar alberga impresionantes colecciones de Paleontología, Minerales, Rocas y Meteoritos. Por ejemplo, en una de las vitrinas se exhiben ejemplares de cuarzo, azufre, minerales radiactivos, cristales de Naica y pirita, entre otros tesoros geológicos.
Uno de los museos imprescindibles de la CDMX
El museo tiene seis salas de exposiciones, pero en el segundo piso destacan diez óleos del paisajista mexicano José María Velasco, que muestran la evolución de la vida en la Tierra a lo largo de los últimos 500 millones de años. También encontrarás un salón para el consejo de la institución, además de laboratorios, departamentos de trabajo y una biblioteca. Por su antigüedad, su historia y su importancia, es uno de los museos imprescindibles de la CDMX. El horario de visita es de martes a domingo, de 10:00 a 17:00 horas, y la entrada cuesta $30 pesos para el público general y $25 para estudiantes, maestros y adultos mayores.
Dirección: Jaime Torres Bodet 176, Santa María la Ribera
Página: museo.geologia.unam.mx
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