Baja California Sur alberga algunos de los escenarios naturales más espectaculares de todo México, característicos por sus panoramas biodiversos y con multiplicidad de ecosistemas. Cuenta también con algunos resorts de armonía perfecta con su entorno, lo que resulta en espacios de contemplación natural y diseño exclusivo, y que sin duda alguna serán perfectos para disfrutar unas vacaciones inolvidables. Aquí te compartimos uno de ellos, completamente inmerso en el desierto de Todos Santos y ofreciendo una estancia pacífica a cada uno de sus huéspedes, tienes que visitarlo.
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Definitivamente, Todos Santos es uno de los destinos más especiales en Baja California Sur, oculto en su desierto multicolor y con una riqueza cultural tan sorprendente como sus paisajes. El Pueblo Mágico abunda también en alojamientos de belleza suprema, entre ellos Paradero, un hotel de diseño completamente inmerso en el desierto y entre las mejores opciones para disfrutar un escape pacífico.
Más que como un hotel, Paradero en Todos Santos se define como un proyecto de alto diseño enfocado en ofrecer a sus huéspedes una estancia llena de paz y contemplación natural. Cada uno de sus rincones tiene el propósito de brindar una oportunidad de reflexión y conexión personal, creados a modo de santuario y con grandes espacios desde donde apreciar el entorno desértico, así como consentirse con las experiencias exclusivas que ofrece el lugar.
Las suites de Paradero en Todos Santos destacan por su maravilloso diseño artesanal, que privilegia el uso de materiales locales y tonalidades crudas, esto para dar protagonismo a los paisajes naturales que se aprecian desde cada una de ellas. Se puede optar por una habitación con vista al jardín, la montaña o las cactáceas de la sala, y algunas de ellas inclusive cuentan con hamacas flotantes al aire libre, así como rooftops privados y jacuzzis inmersos en su entorno orgánico.
Cabe destacar que Paradero ofrece diversas actividades recreativas a sus huéspedes, como yoga y meditación, recorridos de senderismo, sesiones de surf o clases de cocina. En caso de querer disfrutar la visita a Todos Santos en completa tranquilidad, entonces vale la pena reservar algún tratamiento en su spa –masajes, temazcal, faciales– o deleitarse con la gastronomía nacional de su restaurante, que se encarga de emplear ingredientes locales y de producción sustentable en cada una de sus preparaciones.
