No es un secreto que Michoacán es considerado uno de los estados más bonitos de la República Mexicana. Dentro de su territorio alberga grandes atractivos turísticos como Pueblos Mágicos y algunas playas paradisíacas poco conocidas. Sin embargo, esto no termina ahí ya que también resguarda sitios naturales de extraordinaria belleza. Tal es el caso del Parque Nacional Lago de Camécuaro, el cual puedes visitar y recorrer a través de una pequeña embarcación y conocer la leyenda que lo rodea.
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El Parque Nacional Lago de Camécuaro se encuentra ubicado en la ciudad de Tangancícuaro de Arista, a tan solo una hora y 17 minutos del Centro Histórico de Michoacán. Colinda a su vez con Zamora, una pequeña ciudad michoacana que se caracteriza por ser un lugar donde abundan las fresas y las zarzamoras. Para llegar a este sitio puedes tomar la carretera Morelia-Guadalajara o seguir la ruta Zamora-Tangancícuaro –ahí salen autobuses que te llevan hasta el lago–.
Una vez ahí, te recomendamos rentar una pequeña embarcación para que puedas navegar en sus aguas y, de preferencia, contratar un guía de turistas para que conozcas al máximo la historia de este lugar. De acuerdo con la leyenda purépecha, en este sitio ocurrió una trágica historia de amor. Cabe resaltar que para esta civilización indígena los lagos son sagrados y representan una parte fundamental en su desarrollo.
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Se dice que en el Parque Nacional Lago de Camécuaro habitó Huanita, una hermosa princesa que se enamoró de Tangáxhuapan, sobrino y heredero de Tariácuri, fundador del Imperio Purépecha. La princesa fue secuestrada por Candó, un sacerdote que la mantuvo oculta en una yácata –pirámide prehispánica–. Se dice que Huanita lloró tanto por su pena que se formó un lago con sus lágrimas, de ahí que este sitio en purépecha significa ‘lugar de la amargura oculta’.
Cuando su amado se enteró del secuestro emprendió el rescate tomó una flecha y le disparó a Candó, esta le atravesó y clavó en un sabino, el cual se partió y formó un hermoso manantial de agua verde. Quienes se han metido a nadar, dicen que una mujer hermosa les jala los pies. Y aunque no sabes si esto es real, lo que sí es cierto es que es uno de los parques más bonitos donde abunda una gran variedad de fauna y flora como los sabinos, fresnos y magueyes.