En medio del desierto de San Luis Potosí, se encuentra uno de los destinos turísticos más bonitos y con aire de misterio en todo México. Se trata de Real de Catorce, un sitio que ha logrado cautivar a sus visitantes, gracias a su arquitectura tallada en rocas, sus calles empedradas y sus enormes cerros que parecen resguardarla. Este lugar también es conocido como ‘pueblo fantasma’, debido al silencio de sus espacios y sus fascinantes leyendas que enamoran y cautivan a todos aquellos que lo visitan. Solo basta con caminar por sus calles para ser testigos de la inigualable belleza que ese sitio tiene para ofrecer a sus visitantes, así como sus principales atracciones turísticas.
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Hablar sobre la historia de su construcción, es regresar al siglo XVIII, donde se dice fue su máximo período de esplendor. Durante esta época, Real de Catorce, junto con Zacatecas y Guanajuato, se convirtieron en líderes en la extracción de plata. Una vez que esta actividad decayó, obligó a sus habitantes a abandonarlo, de ahí que surgiera el famoso nombre de ‘pueblo fantasma’. Aunque existen varias teorías alrededor de la procedencia de su nombre, una de las más populares tiene que ver con la existencia de una banda de ladrones que a menudo solían robar en los caminos de este lugar, pero al ser aprehendidos y ejecutados, se dieron cuenta que eran un total de 14 ladrones y, de ahí surgió el nombre como actualmente se conoce.
Real de catorce se unió al programa de pueblos mágicos en 2001 y, desde entonces es un sitio lleno de encanto y recuerdos que alaban la magia de su pasado. Entre sus principales sitios turísticos destacan el Túnel de Ogarrio, en su plaza principal, el templo dedicado a la Purísima Concepción, los restos de la antigua Casa de La Moneda, el Palacio Municipal y su Palenque de Gallos, con asientos labrados en piedra. Muy cerca de ahí se pueden observar los restos de lo que fuese la Plaza de Toros y los espacios dedicados al frontón y Wirikuta, un sitio sagrado para los huicholes.
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Real de Catorce, de igual manera es famoso por sus leyendas, pues se dice que su largo túnel albergó perros salvajes y ancianos que aguardaban la muerte. También se cuenta la fascinante historia de ‘El Jergas’, un hombre que se aparece dentro del socavón del refugio, en el momento exacto en que la jornada laboral termina. Se dice que, el último minero en salir es quien se lo encuentra y le pide regresar con él al interior de la mina. Los trabajadores que lo acompañaban eran encontrados inconscientes, pero en zonas estratégicas de mayor riqueza. Hay quienes dicen que este mítico personaje no es malo, sino que fue un trabajador que falleció en esta zona.
Otra de las leyendas que cautiva es ‘El Charrito y los Pendencieros’. El relato cuenta que dos amigos mineros, solían ir a una cantina a beber pulque, al final de su jornada laboral. Tras su borrachera y ánimos de mostrar quien era el mejor se enfrentaron en una riña, pero se dice que una tercera figura intervino y luchó contra ellos hasta dejarlos inconscientes. Al recobrar la consciencia, estos hombres aseguraron que quién intervino aquella noche de disputa fue Francisco de Asís, también conocido como ‘El Charrito’, –pues según la leyenda, este santo cuida a los desposeídos y borrachos. Sin duda, Real de Catorce es un sitio que vale la pena conocer, ya sea por su arquitectura, sus sitios de interés y sus leyendas.
