A los alrededores de la CDMX existen infinidad de espacios característicos por su belleza natural, que en ocasiones ofrecen también una propuesta gastronómica digna de descubrir, lo que sin duda alguna convierte la visita en una experiencia espectacular. A poco menos de una hora de la capital se encuentra un oasis de atractivo similar, oculto entre la vegetación orgánica de La Marquesa y ofreciendo a sus comensales una propuesta de cocina tradicional mexicana.
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La Marquesa es uno de los Parques Nacionales más bonitos del Estado de México, ubicado bastante cerca de la CDMX y consolidado como una de las escapaditas predilectas para disfrutar una experiencia de conexión con el medio ambiente. Entre sus secretos mejor guardados se encuentra La Escondida, un restaurante ubicado justo en medio del bosque, cuya visita será un highlight al recorrer La Marquesa.
La Escondida es uno de los restaurantes en la naturaleza donde disfrutar una experiencia clásica y tradicional, así como algunos de los paisajes naturales más espectaculares hacia el Parque Nacional. Se ubica justo frente a un escenario rocoso y abundante en vegetación endémica, rodeado también de corrientes de agua que hacen de cualquier comida una actividad inolvidable.
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En cuanto a la propuesta gastronómica, este restaurante en La Marquesa destaca la cocina tradicional del Estado de México, así como los ingredientes obtenidos a sus alrededores. Debido a que la pesca de truchas es una de las actividades predilectas en la zona, éstas son una de las especialidades en La Escondida, perfectas para compartir en familia y disfrutar un plato representativo de la región. También hay lechón, cabrito, cecina, chamorro y conejo, al igual que una selección de bebidas más casual y que será perfecta para acompañar sus alimentos.
Cabe destacar que, además de ser un restaurante imperdible en La Marquesa, La Escondida también cuenta con cabañas acogedoras donde pasar la noche, que sin duda alguna serán perfectas para quienes quieran disfrutar una visita despreocupada y dormir rodeados de un paisaje natural espectacular. En caso de ser posible, se recomienda acudir entre semana, ya que sábados y domingos suele haber un mayor flujo de gente en su espacio.