Entre tantas maravillas naturales escondidas en México, es una verdadera suerte encontrarse con alguna. La revelación que compartiremos aquí es la del Río Agua Salada, un lugar que seduce a sus conquistadores con sus deliciosas aguas termales y cristalinas, rodeadas de árboles y plantas, con poca o nada de gente alrededor, disfrutando de todo esto sin gastar un solo peso. Este río se encuentra en el Municipio de Atenango del Río, justo en el límite entre Guerrero y Morelos, de hecho el mismo río los divide, así que dependiendo de qué lado del río salgas, estarás en un estado u otro . Y lo mejor es que este río escondido cerca de la CDMX está a solo dos horas y media de la capital. Es el escape perfecto para desconectarte y disfrutar de la naturaleza.
¿Qué hace especial al Río Agua Salada?
Este paraíso virgen ha sido un secreto bien guardado por los habitantes de Huixastla, el pueblito más cercano a los manantiales. Está rodeado de la hermosa vegetación de la Reserva de la Biósfera, en la Sierra de Huautla. Lo mejor de todo es que el río es alimentado por manantiales termales, así que el agua siempre está templada, perfecta para un buen chapuzón. Además, como el río es poco profundo, es un lugar ideal para nadar con tranquilidad. Tienes un amplio espacio para zambullirte, las orillas están rodeadas de grandes rocas donde puedes sentarte y sentir la corriente refrescante desde ahí. Si te da curiosidad seguir el camino del río, te toparás con otros manantiales que bajan de la Sierra, como la Poza Azul, otro lugar espectacular para nadar. Además, el agua del río es tan cristalina que se puede observar la gran variedad de peces que lo habitan.
¿Cómo llegar al Río Agua Salada?
Hay varias formas de llegar a este río escondido cerca de la cdmx, dependiendo de dónde salgas. Si vienes de la Ciudad de México, toma San Antonio Abad y calzada de Tlalpan hacia el viaducto Tlalpan en Ejido Viejo de Santa Úrsula Coapa. Luego sigue por la México 95D hacia Teocalcingo y, a partir de ahí, sigue las indicaciones en la carretera. También puedes optar por la Autopista del Sol, tomando el tramo Chilpancingo-Cuernavaca. Para eso, ve a la plaza de cobro ‘Ing. Francisco Velasco Durán’, mejor conocida como la caseta de Alpuyeca, y después toma el retorno que está justo después del pueblo de Coaxitlán, Morelos. Desde ahí, encontrarás un camino rural que te llevará a Agua Salada. Ten en cuenta que los autos solo llegan hasta cierto punto, así que tendrás que continuar la aventura caminando por un bonito sendero. Dependiendo de la ruta que elijas, quizás te toque cruzar un puente colgante. Con el sonido del río de fondo, te irás acercando hasta que veas el letrero que dice que has llegado al Río Agua Salada.
Recomendaciones para tu visita
Dado que este lugar es un rincón virgen y secreto, no encontrarás servicios como baños ni puestos de comida. Es una aventura completamente natural, así que te recomendamos llevar tu propia comida para disfrutar de un picnic de ensueño, rodeado de agua y vegetación. Aunque el acceso es gratuito, es buena idea llevar algo de efectivo por si surge algún gasto adicional. Y, por favor, ¡no olvides llevarte tu basura! Es súper importante cuidar estos espacios para que sigan manteniendo su esencia virgen y natural.