Los Pueblos Mágicos de Oaxaca no solo muestran parte importante de su increíble patrimonio indígena, sino también vestigios de la conquista en los que se puede apreciar un poco de la influencia europea de muchas construcciones en México. Apenas a dos horas de Oaxaca de Juárez se encuentra San Pedro y San Pablo Teposcolula, un Pueblo Mágico de maravilloso atractivo arquitectónico que vale la pena descubrir. ¡Algunos de sus templos te harán sentir en la antigua Grecia por sus enormes columnas de cantera!
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San Pedro y San Pablo Teposcolula es uno de los Pueblos Mágicos más especiales de Oaxaca, ubicado al noreste del estado y resguardando un increíble territorio de tradiciones vigentes. Parte importante de su atractivo recae en su maravilloso patrimonio arquitectónico, en el que se puede percibir la fusión de influencias indígenas y europeas, que a su vez transporta a sus visitantes hasta épocas antiguas.
Entre sus joyas arquitectónicas más destacables está el Templo y Claustro De San Pedro y San Pablo Teposcula, con una estructura monumental de cantera rosa y blanca cuya construcción data del siglo XVI, y cuenta on na preciosa capilla abierta –¡considerada como la más grande del mundo!– y amplios espacios donde entra la luz natural. El exconvento se dedicó a los apóstoles Pedro y Pablo, y los detalles de su construcción muestran los avances científicos y tecnológicos de su época; además, sus imponentes columnas de cantera evocan una sensación de estar en la antigua Grecia.
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A pesar de ser una de las más importantes, el Templo y Claustro De San Pedro y San Pablo Teposcula no es el único atractivo del Pueblo Mágico, ya que el destino también abunda en demás espacios culturales, como su Parque Municipal, su Capilla de Santa Gertrudis, su Casa de la Cacica y su Centro Ecoturístico Yucundaa. Este último alberga una importante riqueza natural, permitiendo a sus visitantes acampar en su territorio y disfrutar una experiencia de conexión con la naturaleza.
Aunado a esto, cada rincón del Pueblo Mágico de San Pedro y San Pablo Teposcolula invita a descubrir su patrimonio histórico, a través de calles empedradas de encanto tradicional, construcciones imponentes que muestran apenas un pedacito de su pasado y un calendario cultural de festividades que vale la pena conocer.
