Polanco es una colonia que abunda en pequeñas – y no tanto – joyas ocultas, algunas de ellas el spot ideal para disfrutar de una noche de tragos entre amigos, así como una atmósfera exclusiva y de servicio destacable. Los speakeasy son perfectos para ello, ya que mantienen su espíritu misterioso que data de la época de la prohibición, pero con tragos clásicos y de autor que le brindan a su propuesta un toque contemporáneo. Justo así es Testarossa, oculto dentro de uno de los restaurantes más destacables de Polanco, y compartiendo un maravilloso diseño en tonalidades rojas inspirado en un submarino. ¡Tienes que conocerlo!
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Testarossa será uno de los mejores spots en Polanco para prolongar la fiesta, o bien disfrutar un par de drinks como precopeo, pero rodeado de una atmósfera misteriosa y exclusiva. Se localiza en la parte trasera de Colmillo, extendiendo su propuesta en una maravillosa carta de coctelería creativa y platos más rebeldes, al igual que un sorprendente espacio de iluminación en tonalidades rojas y música DJ.
Este speakeasy se oculta detrás de una gran puerta de submarino en la parte trasera de Colmillo – justo de camino a sus sanitarios -, que a su vez resguarda un pequeño salón rojo que mimetiza las embarcaciones marinas, decorado con detalles contemporáneos, pinturas renacentistas con luces neón, asientos de cuero y pequeñas mesas marmoleadas. Lo mejor será visitar primero Colmillo y prolongar la noche en Testarossa, o bien llegar directamente a este último y deleitarse con su propuesta.
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Si bien el menú de Testarossa comparte la calidad de producto y excelencia técnica de su restaurante, se permite ser un poco más rebelde y reducido. En la sección de alimentos encontrarás tacos y carnes, los primeros de filete con tuétano o en trompos especiales – cerdo, res y pollo al carbón -, mientras que las carnes en preparaciones más casuales y perfectas para compartir – Reuben Sandwich, nuggets con caviar, Cheesy Burger -.
Su carta de bebidas cuenta con los tragos clásicos característicos de los speakeasy, al igual que cócteles de autor que reinventan algunos sabores representativos de México. Un ejemplo de ello es su ‘Martini de Tamborines’, elaborado con el dulce picosito y afamado por muchos; también vale la pena probar su ‘Margarita Yuzu’ o su ‘Bubble of Berries’.
