Si hay algo que ha caracterizado a México con frecuencia, es que es uno de los principales países exportadores de frutas en el mundo entero. Esto debido a su diversidad geográfica y climática que le permite producir una variedad de alimentos durante todo el año. Uno de los frutos con mayor cosecha es la zarzamora, la cual tiene su mayor producción en Zamora, una ciudad michoacana llena de historia, cultura y tradición.
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Zamora o mejor conocida como Zamora de Hidalgo, es una ciudad michoacana ubicada a tan solo una hora y 15 minutos del Centro Histórico de Michoacán. Este destino forma parte de uno de los 115 municipios que dividen Michoacán. Además se encuentra muy cerca de la región Lerma- Chapala y de grandes atractivos turísticos como lo es el Parque Nacional Lago de Camécuaro, el cual está inspirado en una leyenda purépecha.
Aunque en la actualidad esta ciudad michoacana se caracteriza por ser uno de los destinos con mayor producción de zarzamoras y otros frutos rojos como fresas y arándanos, también es uno de los sitios más bonitos de México. Zamora fue fundada el 18 de enero de 1574, por el Dr. Alfonso Martínez, desde entonces y hasta la fecha ha sido un espacio histórico y cultural de gran relevancia dentro de la República Mexicana. Tanto así que tiene mucho que ofrecer a sus visitantes.
¿Qué ver en Zamora, Michoacán?
Catedral de Zamora
La Catedral de Zamora, también conocida como el Santuario, La Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe o ‘la inconclusa’ es, probablemente el principal atractivo turístico de esta ciudad michoacana. Este templo se caracteriza por su arquitectura de estilo neogótico, en la cual predomina la cantera rosa y granito natural. Se compone de dos torres que miden 107 metros de altura, convirtiéndola catedral en la catedral más alta de México y la sexta más grande de Latinoamérica, aunque también es una de las más altas del mundo.
Teatro Obrero
Otro de los grandes atractivos de esta ciudad michoacana es el Teatro Obrero. Esta construcción del siglo XX se caracteriza por su arquitectura de estilo neoclásico. Fue mandada a construir por el obispo José Otón Núñez, con la intención de crear un un espacio recreativo para la difusión de las artes a las cuales pudieran tener acceso los obreros de la zona. Debido a esto fue nombrado como Centro Recreativo de Obreros Católicos y finalmente pasó a ser el Teatro Obrero. Actualmente el recinto se sigue ocupando para montar obras de teatro o ser la sede de algún concierto.
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Templo San José
Ubicado en la avenida 5 de mayo, el Templo San José se posa como uno de los atractivos imperdibles en Zamora, Michoacán. Aunque este sitio religioso se destaca por su estilo neoclásico, también lleva impregnado toques de la arquitectura modernista del siglo XX. Su construcción data de 1880 y el templo está dedicado a la deidad San José, también conocido como el Santo Patriarca.
Templo de San Francisco de Asis
El Templo de San Francisco de Asís es, probablemente, uno de los centros religiosos más importantes en esta ciudad. Su construcción tuvo que ver con la llegada de los franciscanos a la zona – de ahí el nombre –. Se comenzó a edificar en 1717, sin embargo, en los años posteriores continuó su obra bajo el mandato de otros franciscanos. Fue iglesia y convento y en la actualidad aún conserva su arquitectura original.
¿Qué comer en Zamora, la ciudad michoacana exportadora de frutos rojos?
Se sabe que Zamora es uno de los mayores productores y exportadores de zarzamoras y frutos rojos. Sin embargo, su gastronomía también es una de las más ricas y vastas del país. Entre los platos típicos más destacados se encuentran los chongos zamoranos, arroz a la zamorana, bacalao a la tranca y sopa de ajo, por mencionar algunos.