Coyoacán es una de las colonias mas preciadas de la Ciudad de México, característica por su patrimonio artístico y el encanto sosegado que mantienen sus calles. Además de su increíble propuesta cultural, también es sede de un tesoro invaluable que alberga la memoria sonora de México: la Fonoteca Nacional. Pocos conocen la historia fascinante de este lugar, que alguna vez fue conocido como Casa Alvarado y el último hogar del renombrado escritor Octavio Paz. Aquí te contamos más al respecto.
La Fonoteca Nacional es uno de los recintos más importantes de todo México, una institución dependiente de la Secretaría de Cultura cuyo quehacer es preservar, difundir y estudiar el patrimonio sonoro del país. Juega un papel fundamental en la conservación de la identidad cultural y la historia nacional, establecida dentro de una maravillosa construcción patrimonial donde actualmente se atienden tareas como conservación, catalogación y digitalización de obras sonoras y audiovisuales.
La historia de la Fonoteca Nacional se remonta a mediados del siglo XX, cuando se construyó la casa que hoy en día alberga sus instalaciones. Originalmente conocida como Casa Alvarado, esta hermosa edificación de influencia andaluza y morisca sirvió como residencia de la familia Alvarado –una de las familias más prominentes de la época–, para posteriormente convertirse en hogar del poeta Octavio Paz. Éste habitó la casa durante los últimos años de su vida, y fue hasta 2004 que la Secretaría de la Función Pública cedió la Casa Alvarado al Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
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La Fonoteca Nacional se fundó oficialmente el 10 de diciembre de 2008, y lleva casi 15 años dedicándose incansablemente a la preservación y difusión del patrimonio sonoro mexicano. Su acervo cuenta con una vasta colección de grabaciones históricas, desde música tradicional hasta archivos referentes a personajes importantes en la historia del país. Aunado a esto, lleva a cabo investigaciones y programas educativos para fomentar el estudio y la apreciación sonora.
Definitivamente, se trata de una institución invaluable que juega un papel fundamental en la conservación de la memoria nacional, con una historia que le incorpora elementos de fascinación poética y relevancia cultural. Ya sea para deleitarse con su patrimonio arquitectónico, la belleza ornamental de sus jardines naturales o sus exposiciones constantes, visitar la Fonoteca Nacional es una experiencia imprescindible en Coyoacán.
