Existen algunos lugares en México que cuentan con un gran atractivo arquitectónico, además de historia y tradición y, que pocas veces son conocidos. Tal es el caso de Teziutlán, un encantador pueblo mágico, situado en el corazón de Puebla que, a diferencia de otros lugares, ha permanecido en bajo perfil. Su nombre proviene del náhuatl y significa ‘lugar junto al cerro lleno de granizo’. Su ubicación muy cerca a la CDMX, lo convierte en el pueblito que debe conocer, gracias a su cercanía con la ciudad y por sus destinos turísticos que tienen mucho que ofrecer.
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Teziutlán, también es conocido como ‘La Perla de la Sierra’ y es famoso por su ambiente lleno de misterio y por tener la mayoría del tiempo un clima un tanto frío y una inmensa neblina que cubre los edificios y, que le ha dado ese toque único e inigualable. Este pueblo mágico nos demuestra que tiene mucho más que ofrecer que solo una arquitectura única y bella, sino que también cuenta con una infraestructura turística que va desde hoteles, restaurantes, tours y excelente gastronomía.
Su historia se remonta a la época prehispánica y, también se dice que fue aquí por donde Hernán Cortes se abrió paso para llegar a la Gran Tenochtitlán. Por otro lado, durante la lucha con los franceses, las tropas de Austria que los acompañaban se instalaron en esta ciudad durante el año 1865, y un año más tarde la Guardia Nacional Teziuteca logró vencerlos. Después vino su participación en la Revolución y en la Guerra Cristera. En la actualidad forman parte de los 217 municipios más importantes de Puebla y entre sus principales atractivos destacan su Catedral, La Plaza de Toros, Centro Ferrocarrilero, Plaza Cívica, El Palacio Municipal, Teatro Victoria, por mencionar algunos.
Catedral Santa María de la Asunción
Este pueblito en Puebla tiene como atractivo principal su Catedral Santa María de la Asunción. En sus inicios el templo era consagrada a San Miguel Arcángel, luego en 1730, se inició la construcción de lo que sería la Capilla del Sagrario, pero tras un incendio se vio gravemente afectada. Y fue hasta 1821, cuando se inició su reconstrucción, bajo el nombre que conocemos actualmente. Su arquitectura se destaca por el uso de piedras de cantera, de estilo barroco y neoclásico.
Teatro Victoria
Es una edificación de estilo francés neoclásico, creada por un grupo de accionistas que buscan un espacio para beneficio de las escuelas públicas. En sus inicios el recinto era utilizado para realizar eventos escolares y, en 1889, abre sus puertas a ‘La Marcha Victoria’, de donde toma el nombre y se convierte en el Teatro Victoria. Con la llegada del ferrocarril, varias compañías de ópera y zarzuela se presentaron aquí. Con la llegada del cine y presentaciones de box, el público dejó de visitarlo. En 1930 se convierte en el Gran Cine Variedades y se proyectan películas del cine nacional e internacional, causando una gran sensación por parte del público de Teziutlán. Finalmente, en el año 2002, el teatro es donado al estado de Puebla y, en 2006 el ayuntamiento lo remodela para que recobrara su belleza, colorido y tradición de su primera edificación.
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Plaza de Toros El Pinal
Las plazas de toros en Teziutlán tienen registros desde la segunda mitad del siglo XIX, pero fue hasta 1964, cuando el ingeniero Norberto Gómez ‘el Pinal’, convirtió la primera plaza de toros techada, con un plástico que se sostenía de pilares instalados alrededor de la misma. Luego de 40 años, se hace una remodelación, adquiriendo el aspecto que tiene hoy en día, una estructura metálica y techo laminado. También se acondicionaron vestidores y baños para los espectadores y el cupo es para aproximadamente 46000 personas. El recinto también es ocupado para rodeos, jaripeos, palenques, conciertos y convenciones.
Centro Ferrocarrilero
En 1900, Teziutlán festejaba la llegada del ferrocarril a la región, un inventó nuevo que solía hacer viajes largos y que no sólo transportaba pasajeros, sino también mercancías. El 14 de marzo de 1993, el ferrocarril hizo su último viaje, para despedirlo miles de personas se dieron cita para escuchar el silbido de la máquina desaparecer para siempre. Actualmente es sede del Centro Cultural Ferrocarrilero y en sus instalaciones se conservan las máquinas y algunos vagones que se utilizaron mientras estuvo en marcha. En su interior alberga el Museo del Ferrocarril y la Saña de los Teziutecos.
Casa de Cultura
También conocida como ‘La Casa Toral’, es una de las casonas más antiguas de Teziutlán. Su construcción data a principios del siglo XIX, conservando la arquitectura serrana, la techada con teja, pisos de duela y cantera usada para los pasillos y patios. En su interior los arcos adornaban la casa, al igual que sus balcones de la fachada principal. A lo largo del tiempo, ha sufrido distintas transformaciones, ha sido sede del antiguo Liceo Teziuteco, fábrica de puros, mesón y cuartería, hotel y vecindad. Pero fue hasta 2006, cuando el Gobierno Municipal la remodela y la conserva como sede de la Casa de Cultura, donde actualmente se imparten talleres de música, danza, pintura, entre otras.
