Si te consideras un amante de la historia de México, te volará la cabeza saber que muy cerca de la capital mexicana existe una propiedad con un fuerte acervo cultural que aún conserva su arquitectura original, la puedes visitar e incluso realizar tus eventos sociales ahí. Se trata de la Hacienda de Chiconcuac, la famosa propiedad construida y habitada por Martín Cortés Malintzin, el primogénito de Hernán Cortés y La Malinche.
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La Hacienda de Chiconcuac se localiza a tan solo dos horas en un viaje por carretera partiendo de la CDMX. Para llegar, tienes que tomar la carretera México-Cuernavaca o la Autopista del Sol y desviarte al Pueblo Mágico de Xochitepec, en Morelos, municipio donde se encuentra ubicada la propiedad. Una vez que te encuentres fuera de la edificación, te darás cuenta de que se trata de una hacienda muy antigua –ya que fue construida durante la época de la conquista en el siglo XVI–.
De acuerdo con la historia, esta hacienda fue construida y habitada por el mismísimo Martín Cortés Malintzin, hijo de Hernán Cortés y la Malinche, una vez que fue reconocido legítimamente por el conquistador español. Sin embargo, no fue hasta el siglo XIX que la propiedad fue adquirida y habitada por Felícita Juárez Maza, hija del ex presidente de México, Benito Juárez.
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Esta propiedad se distribuye en aproximadamente 26 mil metros cuadrados, en los cuales es posible encontrar espacios como capilla, patios y jardines donde podrás observar una gran variedad de flora y fauna. De ahí destaca su arquitectura colonial y su construcción en piedra, con grandes arcos y balcones de fierro donde podrás tomarte fotos y sentir que viajas a través del tiempo.
Actualmente la hacienda está catalogada como Patrimonio Cultural, y puedes visitarla con previa cita para conocer la historia de su pasado o bien puedes rentar el espacio para realizar cualquier tipo de evento social, como bodas, bautizos y graduaciones. El espacio se presta mucho para realizar la ceremonia y la recepción. El montaje para los eventos son mágicos, únicos y de atmósfera inigualable.