No todos los paraísos cuestan una fortuna, de hecho, algunos ni siquiera cobran la entrada. Así es la Reserva Ecológica del Río Pancho Poza, un rincón escondido entre las montañas de Veracruz que parece sacado de una postal. Con sus aguas cristalinas de tonos turquesa, pozas naturales, cascadas y un entorno verde que se siente intacto, este oasis en Altotonga es uno de los secretos mejor conservados del estado. A solo una hora de Xalapa, dos de Puebla y menos de cuatro de la CDMX, este lugar es perfecto para desconectarse, respirar aire puro y sumergirse –literalmente– en uno de los ríos más limpios y bellos de México.


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Pozas, cascadas y un bosque de niebla: la belleza de Pancho Poza
La aventura en Pancho Poza empieza con una caminata tranquila de unos 20 minutos a la orilla del río, entre árboles, vegetación y el sonido constante del agua corriendo. El camino te lleva hasta la cascada principal, una caída de 20 metros de altura, perfecta para refrescarse en sus pozas cristalinas. Entre las más populares está la famosa Poza del Cocodrilo, con aguas tan limpias que puedes ver el fondo sin problema. Eso sí, la temperatura del agua cambia según la temporada, puedes encontrarla fría, templada o incluso tibia, pero siempre se antoja un buen chapuzón. Todo esto está rodeado por un bosque de niebla lleno de biodiversidad; si tienes suerte, podrías cruzarte con musarañas, salamandras y otras especies curiosas. También hay un mirador que te regala una postal inolvidable del paisaje. Es un lugar para conectar con la naturaleza sin filtros ni prisas.



Todo lo que puedes hacer en Pancho Poza
Además de nadar por horas en sus pozas cristalinas, en Pancho Poza también puedes cruzar puentes colgantes sobre el río, hacer senderismo por sus caminos naturales o, si te late la aventura, animarte a hacer rappel en la roca junto a la cascada principal. Justo detrás de la cortina de agua se esconde una cueva que vale la pena explorar, y si vas con calma, también puedes disfrutar de la observación de aves. La reserva abarca unas 50 hectáreas y cuenta con asadores y canchas para que te diviertas con tus acompañantes. Si te quieres quedar más tiempo, hay una zona para acampar o puedes hospedarte en las cabañas de El Rincón de Pancho, que tienen de todo para que te relajes: fogateros para disfrutar la noche y hasta cabañas familiares con jacuzzi, así como un restaurante abierto de 9:00 a 18:00 p.m. Perfecto para alargar la escapada más de un día.



Algunas recomendaciones en tu visita a este paraíso
Si no sabes nadar, lo mejor es llevar chaleco salvavidas, ya que el río puede ser profundo en algunas partes. Para llegar a Pancho Poza desde el centro de Xalapa, solo tienes que tomar la carretera rumbo a Altotonga; desde ahí puedes tomar un taxi o, si prefieres caminar, hay un trayecto de entre 30 y 40 minutos hasta la reserva. Algo súper importante: este lugar se ha mantenido bien conservado gracias al respeto de sus visitantes, así que como viajeros también nos toca cuidarlo. Evita dejar basura, no uses jabones o bloqueadores que puedan contaminar el agua, y trata de llevar tus alimentos en envases reutilizables. Así, ayudamos a que este paraíso siga igual de hermoso para futuras generaciones. La entrada a Pancho Poza es gratuita y está abierta de lunes a sábado, de 9:00 a 17:00 horas. Solo considera que, si llevas coche, hay un costo de $80 por el estacionamiento. Pero créenos: es un destino que realmente vale cada minuto del viaje.
Dirección: Gral. Mariano Abasolo Sur 3, Pancho Poza, Altotonga, Veracruz


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