Conoce a la Chef Ana Martorell, una mamá de tiempo completo que estudió derecho y complemento sus estudios –nuestros respetos– con el «Grand Diplome» de Le Cordon Blue en la Universidad Anáhuac México Campus Norte, en donde encontró la pasión que llevaba dentro por la cocina, interpretando sabores e innovando, pero manteniéndose siempre fiel a las tradiciones.
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Hace ya algunos años, ella creó su marca AM Ana Martorell, la cual tiene como objetivo principal crear experiencias gastronómicas a través del paladar, en donde su laboratorio de creaciones comparte el protagonismo.
Sus productos son de la más alta calidad y siempre busca que cada experiencia tenga un toque único, por lo que te vayas queriendo regresar. Ahí, ella imparte workshops y eventos en un espacio llamado El Contenedor, dedicado a cultivar ese chef que muchos llevan dentro, todo mientras sus invitados disfrutan de un rato agradable y se ponen al corriente con sus acompañantes.
Lo que Ana nos quiere trasmitir con esto, es su forma de ver la cocina desde una perspectiva diferente, al estar en contacto directo con los ingredientes que tú mismo vas a poder probar, demostrando que cocinar juntos es mucho más que seguir al pie de la letra una receta.
La Chef Ana Martorell organizó una experiencia para sus amigos, y el equipo de Food and Pleasure tuvo el honor de ser invitado a este laboratorio de creación culinaria para aprender un poco de cómo se hace la magia.
Gracias a Hendrick´s –patrocinador de la noche–, tuvimos la oportunidad de preparar nuestro propio gin, y nos dieron a escoger si queríamos que tuviera pétalos de rosa y menta, frutos rojos o ambos. Nosotros decidimos probarlo con pétalos de rosa y menta, para no perdernos ese acento aromático que desprenden las rosas y que crea una mancuerna perfecta con el sabor de la ginebra.
La experiencia gastronómica comenzó con la elaboración de una pizza de espárragos, albahaca, cebolla caramelizada y queso mozzarella; todo sobre una masa delgada hecha con queso parmesano al horno –estilo chicharrón–, ideal para abrirnos el apetito en lo que esperábamos los demás tiempos.
Continuamos con la preparación de un queso brie al pomodoro, acompañado de rodajas de pan con aceite de oliva al horno –para un toque crunchy–. Esto calmaba nuestra hambre mientras cada uno de los invitados pasábamos a preparar un poco de pasta home made que nos serviría para nuestro siguiente platillo.
Mientras nos tomábamos una copa de vino tinto y nos poníamos al corriente, cada uno de nosotros –como les comentábamos– pasamos a preparar nuestra masa para una pasta servida con portobello, aceite de trufa, yema de huevo y queso parmesano, espolvoreado por encima. Honestamente, les decimos que para nosotros fue un gran detalle que incluyeran en las actividades a los invitados. Creemos que le da un poco de humor ya que no todos sabemos cocinar a la perfección.
Como en varias ocasiones les hemos comentado, el postre no se va al estómago, si no directamente al alma. El postre que preparamos fue una lasaña de frutos rojos con queso mascarpone, el broche de oro perfecto para una noche perfecta.
Dato: Les compartimos que La Chef Ana Martorell cuenta con una pequeña tienda de utensilios para el hogar, al igual que tiene a la venta algunos de los ingredientes –especias, tés, sales y más– que utiliza en sus recetas. Todo de la más excepcional calidad.
¡Coman, disfruten y compartan!