Afortunadamente, cada vez somos más conscientes de los enormes beneficios que el ejercicio tiene en nuestra salud. Más allá de meros cambios estéticos, el ejercicio de fuerza nos ayuda a mejorar nuestra calidad de vida al aumentar la densidad de los huesos, prevenir la diabetes y la resistencia a la insulina y disminuir los niveles de ansiedad y depresión. Aunque el levantamiento de pesas suele ser el ejercicio más asociado al desarrollo de músculo, existen otras actividades para ponerte fuerte y divertirte a la vez. Estas son algunas opciones para hacer ejercicio de fuerza si el gimnasio no es lo tuyo.
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Barre
Si te gusta la idea de hacer ejercicio y tonificar el cuerpo y no logras decantarte por una sola actividad, entonces el barre es para ti. Este entrenamiento combina distintos ejercicios de disciplinas como ballet, danza, yoga y pilates, utilizando una barra como apoyo. Algunos de los beneficios que trae consigo el barre es la quema de grasa, corrección de la postura, mejorar la función cardiaca y trabajar los músculos. Esta es una actividad ideal para quienes buscan un ejercicio efectivo pero de bajo impacto, pues los movimientos fluidos y controlados son benévolos con las articulaciones, además de que no saldrás de tus clases excesivamente exhaustx.
Yoga
El yoga es un ejercicio ancestral famoso por sus múltiples beneficios para el cuerpo y la mente. Sabemos que ayuda a reducir nuestros niveles de estrés y a mejorar la flexibilidad, pero lo que no todos saben es que el yoga también puede ayudarnos a aumentar nuestra fuerza. Hay estudios que afirman que esta actividad puede ser tan efectiva como usar pesos libres ligeros y bandas de resistencia. La clave está en la constancia y en practicar posturas desafiantes, y verás que en cuestión de semanas, no solo mejorará tu movilidad, sino también tu fuerza.
Pilates
Este sistema de entrenamiento nació hace menos de cien años, como una forma de apoyar en la rehabilitación de los soldados heridos en combate. Los pilates son una mezcla de gimnasia, traumatología y yoga que se complementa con el uso de camas especiales para mejorar la fuerza muscular, el control mental y la respiración. Así, esta es una actividad para ponerte fuerte que se centra en entrenar los músculos para mantener el equilibrio y dar firmeza a la columna vertebral. Los pilates son un ejercicio recomendado sobre todo para quienes padecen de dolor de espalda y que buscan una actividad de bajo impacto para las articulaciones.
Natación
Se dice que la natación es uno de los deportes más completos, y la realidad es que ofrece muchos beneficios para quienes están buscando actividades para ponerse fuertes, pero que también sean entretenidas y de bajo impacto. Además de aumentar la capacidad pulmonar, mejorar la circulación y desarrollar la coordinación, la natación trabaja en varios grupos musculares a la vez. De hecho, para desplazarse en el agua, hay que ejercer fuerza en las piernas, los brazos, la espalda, el cuello, el abdomen e incluso en las manos, lo cual por supuesto tiene un impacto en nuestra movilidad y en la tonificación de nuestros músculos.
Spinning
Aunque el spinning se ha puesto de moda más bien como un ejercicio de cardio, también es una excelente actividad para ponerte fuerte, sobre todo si no cuentas con demasiado tiempo y te gusta entrenar con mucha gente y gran atmósfera. Las ventajas para las piernas y los glúteos es evidente, pero estas rutinas también trabajan la espalda —trayendo enormes beneficios para la postura y los dolores lumbares—, el abdomen e incluso los brazos.
