Seguramente más de una vez, caminando por el Centro Histórico, el Palacio Postal te ha robado la mirada. Tal vez incluso has entrado por pura curiosidad a su planta baja, ese vestíbulo bullicioso que, aunque los tiempos han cambiado y casi nadie manda cartas, sigue funcionando como oficina de correos. Pero lo que quizá no sabías es que no todo termina ahí. Pocos saben que es posible subir al segundo y tercer piso, donde se esconde un museo postal y una biblioteca secreta que muy pocos han explorado. Así es, puedes subir por las famosas escaleras de mármol blanco, flanqueadas con la herrería ornamental de bronce y cubiertas por un tragaluz, para descubrir lo que guarda este tesoro arquitectónico más allá de su imponente fachada.



Te puede interesar: Este edificio en la CDMX fue la primera universidad para indígenas en América y tiene una biblioteca y un jardín que casi nadie conoce
La Biblioteca histórica del Palacio Postal
Al llegar al segundo piso del Palacio Postal, puedes iniciar el recorrido por el museo o girar a la derecha y encontrarte con uno de los secretos mejor guardados del edificio: la Biblioteca del Palacio de Correos. Lleva el nombre de Josefina Guzmán Miranda, una mujer que trabajó aquí durante años y que, con enorme dedicación, se encargó de rescatar y preservar libros, cartas, estampillas y otros documentos valiosísimos relacionados con la historia del correo en México. Se dice que la biblioteca resguarda más de 8 mil volúmenes y 240 documentos históricos que datan desde 1580 hasta 1900. Su acervo está enfocado en temas postales y filatélicos, y es un verdadero tesoro para investigadores, coleccionistas y curiosos de la historia.



Un rincón para leer y escribir cartas
Por el valor histórico de estos materiales, el acceso a la biblioteca está restringido y requiere un permiso especial. Pero no todo está fuera de alcance: justo a un lado hay una pequeña sala de lectura abierta al público, con mesas, sillas y un librero del que puedes tomar libros prestados para leer ahí mismo. Desde ese espacio también puedes asomarte y ver los estantes altos y antiguos que resguardan los libros históricos de esta biblioteca. Y como si fuera poco, junto a ella hay una ludoteca donde los más pequeños pueden aprender a enviar su propia carta.



Descubre el Museo Postal y Filatélico del Palacio Postal
Por supuesto, no podemos dejar de hablar del Museo Postal y Filatélico, que se encuentra en el segundo y tercer piso del Palacio Postal. Este espacio está dedicado a contar la historia del correo en México y el fascinante arte de la filatelia. Fue creado para narrar más de 500 años de historia postal, desde los mensajes en la época prehispánica hasta la correspondencia moderna y su impacto en el mundo. En sus vitrinas puedes ver desde el primer sello postal de la historia, emitido en 1840, hasta las estampillas mexicanas con la efigie de Hidalgo, pasando por ediciones conmemorativas. También encontrarás objetos postales antiguos como máquinas de escribir, sumadoras, balanzas, buzones de diferentes épocas, apartados postales y artículos que usaban los carteros, como sus sacos, pichoneras y hasta las bicicletas. Y si eres curioso, hasta los baños valen la pena: están forrados de mármol, porque recuerda, esto es un palacio. Así que ya sabes, la próxima vez que pases por el Palacio Postal no te quedes mirando solo la fachada, entra y descubre todos los secretos que guarda este edificio espectacular.
Dirección: Tacuba 1, Centro Histórico de la CDMX, Cuauhtémoc



¡Conócelo, disfruta y comparte!