7 de las bibliotecas más bonitas de México (para enamorarte de la lectura) 

Las bibliotecas son espacios en los que podemos existir sin prisa, mirar los títulos y recorrer los pasillos sin compromiso, tomar un libro y llevarlo a casa. La lectura no solo contribuye a nuestro crecimiento personal, sino también al desarrollo social y comunitario. Estos espacios pueden acogernos durante horas mientras viajamos a través de las páginas, o bien estudiamos o trabajamos. Y es que hay bibliotecas que te invitan a pasar y ya no te quieres ir nunca. Estas son algunas de las bibliotecas más bonitas de México para enamorarte de la lectura. 

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Biblioteca Palafoxiana, Puebla

A finales del siglo XVII, el obispo Juan de Palafox donó su biblioteca privada para fundar la que se considera la primera biblioteca pública en América. El edificio novohispano —con el mobiliario original— es por sí mismo una obra de arte que te invita a pasar horas admirando los detalles barrocos en cada rincón. Su acervo fue nombrado Memoria del Mundo por la UNESCO y puede ser consultado por investigadores, previa requisición. Está abierta al público general como museo, ya sea en un recorrido guiado o con una audioguía. 

Biblioteca Central, CDMX

Este edificio funcionalista (diseñado por Juan O’Gorman en la década de los 50) y sus impresionantes murales (obra de David Alfaro Siqueiros) se ha convertido en un ícono de la Universidad Nacional Autónoma de México. Cuenta con el acervo educativo más grande del país, repartido a lo largo de sus diez niveles. La fachada ciega ayuda a regular la temperatura y la humedad al interior para conservar los libros, pero los grandes ventanales de la planta baja iluminan el área de trabajo en el que a diario se reúnen decenas de estudiantes a estudiar. 

Centro Cultural Pedro López Elías, Morelos

Esta es la primera biblioteca totalmente ecológica del país, y cuenta con un enorme acervo que incluye, además de la colección general, una colección de monedas y billetes de todo el mundo, una colección cartográfica, una colección multimedia, y una colección infantil con recursos para todas las edades. Es también la primera biblioteca creada con inversión privada en integrarse a la Red Nacional de Bibliotecas Públicas. Cuenta con varios proyectos de fomento a la lectura, como charlas literarias, cursos de educación financiera para niños, e ‘itacates literarios’. 

Biblioteca Juan José Arreola, Jalisco

Es la biblioteca más grande de México y está dividida en dos grandes áreas: la colección contemporánea y los archivos históricos. Desde 1925 es administrada por la Universidad de Guadalajara, y su acervo forma parte del programa Memorias del Mundo de la UNESCO, e invita a los lectores a acercarse a los libros a través de la tecnología y la diversión. Ahí encontrarás una colección de libros de literatura indígena, infantiles, laboratorios de escritura creativa, salas de lectura, cafetería, e incluso un restaurante y un bar. 

Biblioteca Vasconcelos, CDMX

Con más de millón y medio de visitas anuales, la Biblioteca Vasconcelos es una de las bibliotecas públicas más frecuentadas de Latinoamérica. Cuenta con más de 600 mil libros, pero los anaqueles están diseñados para desplegarse, y podría albergar hasta dos millones de ejemplares en su máxima capacidad. El edificio fue concebido por Alberto Kalach como un enorme esqueleto de acero, vidrio, mármol y concreto; el artista mexicano Gabriel Orozco replicó esta idea al crear la obra ‘Matrix Móvil’, la cual cuelga  al centro del vestíbulo principal. Además del área de biblioteca, hay jardines, salas de música y un espacio con actividades para los más pequeños.

Biblioteca Mexiquense del Bicentenario, Estado de México

Esta preciosa biblioteca forma parte del Centro Cultural Mexiquense Bicentenario, un parque público cuenta también con un auditorio, una sala de conciertos, un teatro al aire libre, museos, espacios para talleres y áreas para festivales artísticos. El diseño de este increíble edificio es obra de los arquitectos Alejandro Rivadeneyra y José Moyao.

Biblioteca Conarte, Nuevo León 

En esta biblioteca el verdadero protagonista es la arquitectura, pues los anaqueles y el espacio de lectura se despliegan como un bucle que envuelve al lector a partir de un juego de colores y perspectivas realmente hipnótico. Esta pequeña librería está dedicada a la promoción y venta de las ediciones CONARTE (el consejo para cultura y arte en la ciudad de Monterrey), así como a fomentar el hábito de la lectura. En 2016, la revista Wired la incluyó entre las diez más hermosas del mundo.