Más que como un hotel, estas nueve cabañas se presentan como un ‘refugio de laguna’. A pesar de encontrarse a tan solo dos kilómetros y medio del centro de Bacalar, Boa Boa se siente como los confines del mundo, un lugar ideal para fundirse con la naturaleza y darse un respiro del ajetreo de la vida diaria. Sin embargo, hay dos cosas que se agradecen muchísimo incluso si el plan es perderse en medio de la selva: la antena de wi-fi que provee de internet todo el complejo y la conectividad con el Pueblo Mágico –el cual es fácilmente accesible a pie, en bicicleta, en coche y en taxi–.
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Cada una de estas cabañas lleva el nombre de un animal de la región —Tucán, Iguana, Venado, Jaguar, Colibrí, Halcón, Faisán, Tapir, Manatí—, así como un interiorismo pensado de forma individual para cada espacio, de modo que la experiencia en cada una de ellas es totalmente única. El arte juega un papel preponderante en la identidad de cada habitación y, dependiendo de la cabaña que elijas, los cuadros e ilustraciones –a cargo de la artista chilena Laka Rem— que acompañarán tu estancia serán distintos. Asimismo, el camino que hay que recorrer a través de la jungla para llegar a cada cabaña es único.
Fuera de las cabañas, Boa Boa cuenta con diversas zonas comunes para complementar la estancia, como el comedor, un área de fogata, hamacas, y dos muelles que ofrecen experiencias muy distintas. Por otro lado, también se ofrecen varias actividades a las que puedes inscribirte para completar tu experiencia en este pequeño paraíso. Puedes elegir una actividad acuática —como navegar en velero o disfrutar del amanecer en paddle—, de wellness —como masajes, clases privadas de yoga y sesiones de janzu— o cultural —conocer el pueblo, visitar los cenotes y el fuerte y degustar la oferta gastronómica—.
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Una característica fundamental del principio ecológico es que el complejo está pensado para generar el menor impacto ambiental posible, pues durante la construcción se conservaron todos los árboles del terreno y más bien se diseñó en función del paisaje y de las características geográficas del lugar. Del mismo modo, hay un profundo respeto hacia la laguna y toda la fauna que la habita.
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