La Bahía de Banderas es un paraíso de aguas tranquilas y arena dorada a lo largo de la cual podemos encontrar playas que comparten increíbles paisajes naturales y un espíritu aventurero y desenfadado para pasar unas vacaciones memorables. Si bien el punto de entrada para muchos viajeros es el aeropuerto de Puerto Vallarta, vale la pena salir a descubrir las demás playas de la bahía para descubrir su encanto pintoresco y sus ambientes un poco más tranquilos. Uno de los pueblos de playa en Jalisco que sin duda debes incluir en tu itinerario es Boca de Tomatlán, cuyo oleaje sereno es la puerta de entrada para descubrir las playas menos turísticas de la zona.
A solo 20 minutos en coche desde Puerto Vallarta —a lo largo de una carretera panorámica que corre a lo largo de la bahía— Boca de Tomatlán se presenta como una pintoresca villa de pescadores desde cuyo puerto suelen salir los taxis acuáticos —también conocidos como ‘pangas’— en dirección a Las Ánimas, Playa Caballo, Quimixco y Yelapa. Para los más intrépidos, también es posible iniciar desde aquí una expedición a pie hacia Colomitos, Las Ánimas y Quimixto a traves de las rutas de senderismo que se adentran en la selva de la Sierra Madre.
Sin embargo, sería un error considerar esta playa como un simple lugar de paso, pues aquí mismo podrás pasar un día increíble que se ajusta a todos los justos. En Boca de Tomatlán podrás nadar en sus aguas cristalinas —procura mantenerte lejos del muelle donde se concentran las lanchas—, comer mariscos, la pesca del día y platos típicos en sus restaurantes rústicos a pie de playa y admirar el atardecer desde el malecón mientras disfrutas de una nieve de garrafa.
Para quienes nunca dicen que no a una aventura, Boca de Tomatlán también ofrece varias actividades ecoturísticas, desde practicar snorkel y paravelismo en el mar y paddleboard en el río Horcones, hasta adentrarse en la selva para dar un paseo en una 4×4, descubrir las cascadas cercanas o aventarse desde una tirolesa.
Si te sobra tiempo, te recomendamos visitar el Jardín Botánico de Puerto Vallarta —a menos de 15 minutos en coche— por el cual también corre el río Horcones y es hogar de una importante variedad de orquídeas y plantas locales. De hecho, incluso puedes planear pasar la mañana en Boca de Tomatlán, y por la tarde dirigirte al jardín botánico para recorrer sus espacios y comer en el restaurante Hacienda de Oro.
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