Si eres de paladar dulce, entonces estarás de acuerdo en que uno de los momentos más esperados de cualquier comida es casi al final, cuando llega la hora de elegir el postre y deleitarse con creaciones indulgentes. Existe un restaurante en la CDMX que ahorra toda esa anticipación, ofreciendo un menú exclusivamente de postres y bebidas para su maridaje, consolidándose como un pequeño paraíso culinario de sabores dulces que definitivamente vale la pena conocer.
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Boca es el primer restaurante de postres en la CDMX, un espacio dedicado especialmente a la creación de estos dulces antojos, ofreciendo un menú sublime y de carácter contemporáneo. Liderado por el chef Roberto Gutierrez – quien trabajó de la mano de Josera Castillo en Que Bó! -, brinda un delicado viaje culinario de celebración al postre, característico por su personalidad artística y de presentación impecable.
Se establece dentro de un espacio bastante agradable de la colonia Roma, ambientado con un diseño interior sencillo y limpio, pensado específicamente para no robar protagonismo al colorido de sus postres. Destacan sus tonalidades neutras y su gran barra de servicio – que abarca desde su entrada hasta su cocina abierta -, así como sus sillones junto a la pared y una vitrina donde verás expuestos algunas de sus creaciones dulces.
Entre los aspectos más importantes del menú de Boca es que se respalda de productos 100% naturales y sin conservadores, privilegiando siempre los ingredientes de temporada y cultivo propio – el restaurante cuenta con un pequeño huerto -. Ésto no sólo garantiza que la calidad de sus postres sea excelente, sino también que cada uno de ellos cuente con un sabor vibrante y sorpresivo al paladar.
Encontrarás creaciones contemporáneas y artísticas, difícilmente comparables con cualquier postre que hayas probado. Entre los más recientes está su ‘Cítricos’, una tartaleta con kumquat, hoja de shiso y tréboles – pensado para San Valentín como símbolo de suerte en el amor -; o bien su ‘Piernita’, con la forma particular de una pierna de pollo, pero elaborada a partir de praliné, feuilletine y chocolate de leche.
Si quieres que tu experiencia en Boca sea aún más especial, te recomendamos optar por su menú degustación, lo que te permitirá probar una variedad más amplia de sus postres gracias a sus versiones mini. También puedes preguntar por los maridajes recomendados para cada uno de los elementos de su menú, ya sea una tisana artesanal, café, copa de vino o cerveza.