No cabe duda de que la república mexicana alberga ecosistemas dignos de admirar y, por supuesto apreciar. Ya sea en el norte o sur de nuestro país, la belleza de sus bosques, selvas, playas, ríos, lagos y lagunas no tienen comparación alguna. Tal como sucede con sus cascadas, sitios naturales cuya caída de agua es mágica e incomparable, ideal para visitarlas en lancha, nadar o simplemente hacer un poco de senderismo para llegar a ellas. Por ello, aquí te decimos cuáles son las cascadas más altas de México que debes visitar y darte un buen chapuzón. ¡Toma nota!
Basaseachi, Chihuahua
Dentro del Parque Nacional Basaseachi se encuentra la que es considerada como una de las cascadas más altas de México. Esta formación natural ocupa la segunda posición como una de las pozas de agua más importantes de nuestro país. Tiene una caída de 246 metros, posicionándose por debajo de Piedra Volada, que también se encuentra situada en Chihuahua. La cascada de Basaseachi es uno de los principales atractivos de la zona, debido a que es un lugar ideal para los amantes de las aventuras y el deporte extremo, además es posible observar la diferente flora y fauna de la zona. Pero, para disfrutar este atractivo de mejor manera, te recomendamos visitar el mirador de La Ventana y del Rancho San Lorenzo y, desde ahí admirar su encanto.
Piedra Volada, Chihuahua
Considerada como una de las cascadas más altas de México, Piedra Volada se localiza en la Sierra Tarahumara de Chihuahua. Su caída de agua es de aproximadamente 453 metros y, a la fecha es nombrada como la más alta de nuestro país. Visitarla es un verdadero espectáculo, pero también uno de los mayores desafíos ya que por su ubicación es de muy difícil acceso. Su nombre se originó debido a una saliente roca que se ubica dentro del mismo arroyo, el cual alimenta la cascada. Cabe destacar que esta cascada es mejor visitarla durante la temporada de lluvias, ya que durante la temporada de invierno la caída de agua es casi nula y poco visible al visitante.
Tulimán, Puebla
Ubicada dentro de la Sierra Norte de Puebla, se localiza una de las cascadas más altas y bonitas de México. Se trata de Tulimán, una catarata que, para llegar a ella es necesario acceder al Parque Ecoturístico de Tulimán. Una vez aquí, serás testigo de la espectacular caída de este atractivo natural de aproximadamente 350 metros, la cual divide su descenso en tres partes: una poza mineral y dos ríos. Así mismo podrás realizar senderismo y estar mucho más en contacto con la naturaleza. No olvides tomar muchas fotos y poner atención en la tonalidad de sus aguas, que van cambiando conforme te aproximas, evidenciando su color esmeralda. Cabe mencionar que este atractivo se encuentra a tan solo 30 minutos de Zacatlán, por lo cual te recomendamos visitar este Pueblo Mágico.
Velo de Novia, Chiapas
Con una altura de más de 120 metros, Velo de Novia es una de las cascadas más altas de México, cuya belleza natural radica en la tonalidad turquesa de sus aguas y en la fuerza de la caída de la misma. Esta cascada ubicada en Chiapas se forma por el cauce del río San Vicente, creando pozas naturales rodeadas de extensa vegetación y bellos paisajes a su alrededor. Esta cascada se encuentra dentro del parador ecoturístico ‘El Chiflón’, en donde también se pueden apreciar unas formaciones como Alas de Ángel y Suspiro. Adicionalmente también hay cabañas y diferentes actividades para lanzarte a la aventura. A 40 km de ahí se encuentra el Pueblo Mágico de Comitán y a dos horas de San Cristóbal de las Casas.
Tamul, San Luis Potosí
Localizada a 40 kilómetros de Aquismón, en San Luis Potosí se encuentra Tamul, una de las cascadas más altas de México. Su caída de agua es de aproximadamente 100 metros y estas llegan hasta el fondo de un cañón estrecho y profundo de paredes rojas. Para llegar aquí existen dos maneras de hacer: caminar por arriba o descubrirlas en un paseo en canoa o pangas como también son conocidas. El recorrido dura aproximadamente tres horas, pero es muy ameno y divertido, además lo mejor de todo es que puede apreciar la belleza natural de su entorno, pero, sobre todo, la tonalidad de sus aguas turquesas en todo su esplendor. Lee la nota completa Aquí.