Europa está repleta de construcciones medievales cuyos muros cuentan historias fascinantes de batallas, cortes reales, amores imposibles, festines y verbenas. Tan solo en Francia existen más de 40,000 castillos y fortalezas, muchos de los cuales datan de los siglos XI al XVI y todavía hoy se pueden visitar para admirar el esplendor que se conserva a lo largo de sus salones, corredores y jardines. Tal es el caso del Castillo de Castelnaud, un castillo medieval francés ubicado en el borde de un precipicio en pleno Perigord Negro, donde todavía hoy se llevan a cabo representaciones de prácticas y fiestas medievales que te transportarán a la época de los caballeros y los trovadores.
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La historia del Castillo de Castelnaud se remonta hasta el siglo XII, y desde entonces fue testigo de la historia de Francia, mientras pasaba de un dueño a otro a través de batallas, intrigas y conquistas —por ejemplo, durante la Guerra de los Cien Años fue un punto de discordia entre el bando francés y el británico—, y después de la Revolución Francesa fue abandonado. Poco a poco, la maleza y los saqueos fueron enterrando el antiguo esplendor de este castillo medieval, hasta que en la década de los 60 del siglo pasado comenzaron los trabajos de restauración para regresarle su imponencia.
El día de hoy, el Castillo de Castelnaud es uno de los castillos medievales más importantes de Francia, pues se han hecho esfuerzos para recuperar no solo el inmueble, sino también para convertirlo en uno de los principales sitios de interés y difusión histórica de la zona. Aquí se encuentra el Museo de la Guerra en la Edad Media, el cual resguarda una gran colección de armas y armaduras, y en su bastión se han reconstruido en posición de ataque algunas de las armas medievales más características y potentes de la época medieval.
El castillo está abierto todos los días del año, y recibe a sus visitantes desde las 9:00 hasta las 20:00. El acceso para menores de diez años es gratuito, y no hace falta reservar ni comprar los boletos con antelación. Este castillo medieval en Francia es ideal para pasar un día en familia, con montones de actividades para todas las edades que no solo serán un éxito rotundo, sino que además son fuentes invaluables para conocer más sobre la historia del país.
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Además de la visita libre por el castillo, en la cual podrás recorrer sus corredores, habitaciones y jardines medievales a tu propio ritmo, visitar el museo, admirar las maquetas y aprender a través del material interactivo que el Castillo de Castelnaud pone a disposición de sus visitantes. Para realmente transportarte a esta época, a lo largo del recorrido encontrarás réplicas de vestimentas del mismo periodo en el que se construyó el castillo, maquetas que cuentan la historia de la participación de este castillo medieval francés en la Guerra de los Cien Años, una sala de lectura medieval, y un mural de ‘El ciclo de los Nueve de la Fama’ —una magnífica representación de esta temática decorativa típica de finales de la Edad Media, que habla sobre los grandes héroes y modelos de caballería—.
Pero lo mejor por mucho es su calendario de actividades, el cual tiene eventos todos los días, entre los que destacan el espectáculo nocturno, la visita temática —que consta de un recorrido guiado por personajes de la época—, demostraciones del funcionamiento de un lanzapiedras o catapulta medieval, demostraciones de forja y espectáculos medievales. Ten en cuenta que la mayoría de estas actividades son en francés, pero también ofrecen visitas de la mano de guías expertos en inglés.