Tanto por su belleza natural como por su increíble importancia biológica, los cenotes son de las maravillas naturales más espectaculares en todo México. Gran parte de ellos se concentran en la Riviera Maya, lo que convierte cualquier visita a esta región en una experiencia verdaderamente espectacular. Aquí te contaremos sobre Cenote Manatí, uno de los cenotes abiertos menos conocidos a las afueras de Tulum, ¡donde inclusive podrás nadar con un cocodrilo!
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Aunque visitar Tulum suele asociarse con mucha fiesta y una vida nocturna vibrante, este precioso Pueblo Mágico en Quintana Roo también destaca por su increíble patrimonio cultural, que se extiende desde sus grandes asentamientos arqueológicos hasta sus impresionantes maravillas naturales. Aproximadamente 30 minutos a las afueras de Tulum se encuentra el Cenote Manatí, un precioso cenote que ofrecerá a sus visitantes la posibilidad de nadar con un cocodrilo.
Ubicado aproximadamente 20 minutos a las afueras de Tulum –en la región de Tankah, conocida por su atmósfera más tranquila y sosegada–, el Cenote Manatí es una de las paradas imperdibles para todo amante de la aventura y la naturaleza. Se trata de un cenote abierto cuyas aguas alcanzan hasta los seis metros de profundidad, rodeado de una zona de manglares que le brinda a su espacio una estética paradisiaca.
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Al llegar se podrán vislumbrar preciosas aguas color turquesa, así como un entorno de diversidad biológica sorprendente. Se requiere una pequeña cuota de acceso y, una vez dentro, existe la posibilidad de rentar kayaks y equipo de snorkel, o inclusive reservar clases de buceo con instructores especializados –el Cenote Manatí es favorito para principiantes en este deporte, esto debido a su poca profundidad y los túneles que se extienden por debajo de sus manglares–.
Uno de los aspectos más destacables del Cenote Manatí es que sus aguas y manglares también son hogar de un cocodrilo de nombre Panchito, que nada libremente por el cenote y mantiene una distancia segura a sus visitantes. Aunque esto podría sonar intimídate, locatarios afirman que el cocodrilo es amigable y permanece alejado de turistas, quienes ocasionalmente pueden verlo descansando o nadando en las profundidades.
