Si bien la oferta gastronómica de la Ciudad de México se encuentra en constante crecimiento y recibe variedad de propuestas contemporáneas, también existen recintos que vale la pena reconocer por mantenerse fieles a su herencia tradicional, y el Centro Castellano es uno de ellos. Establecido como referente de la cocina española en México, comparte un espacio clásico de sabores auténticos, y aquí te contamos más para que te animes a visitarlo.
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El Centro Castellano abrió sus puertas hace más de 60 años, y desde entonces ha laborado como un espacio de añoranza a la cocina tradicional de España. Su nombre inicial fue El Tragadero, ubicado en el Centro Histórico de la CDMX y compartiendo un espacio amigable donde, en caso de contar con bajos recursos, se podía adquirir una cuenta a crédito para saldarla en determinado tiempo. Hasta la fecha, el restaurante mantiene la misma relación de calidez y confianza con sus comensales.
Con el paso de los años, su espacio fue evolucionando y adaptándose a las necesidades del mercado, por lo que Grupo Castellano expandió su propuesta con otro Centro Castellano dentro de Camino Real en Polanco, así como demás restaurantes alrededor de la capital. Si bien todos comparten un menú de autenticidad española, su sede en el Centro Histórico cuenta con una atmósfera mucho más clásica y tradicional, que los fines de semana inclusive recibe música en vivo y tunas universitarias.
El menú de Centro Castellano se encarga de mantenerse fiel a la herencia culinaria de España, tanto con recetas familiares que muestran un recorrido gastronómico por diversas regiones españolas, como con la importación de productos exclusivos empleados en la preparación de sus platos. Entre las especialidades de la casa se encuentra su lechón segoviano, asado por tres horas y con un exquisito sabor avinagrado que será perfecto para disfrutar en familia.
También vale la pena probar su famoso mejillón tigre –mejillón fresco empanizado con jamón serrano en salsa bechamel–, su chorizo a la sidra, su paella valenciana con camarones y mariscos, o su lomo de huachinango deshuesado a las brasas. Independientemente de que se busque una visita tradicional o de compartir en familia, el Centro Castellano será una maravillosa opción en la CDMX.
