Desde hace unos días, Shake Shack México le dio la bienvenida al nuevo integrante de su familia: la Chick’n Shack, una hamburguesa hecha con crujiente pechuga de pollo 100% natural, sin hormonas ni antibióticos, con lechuga, pepinillos y herb mayo de buttermilk, todo dentro de un suave bollo de papa de Martin. Su característica principal, es que en cada bocado te permite disfrutar de una textura perfectamente crujiente, debido a que la pechuga de pollo es rebozada a mano en una salsa Shack-made, y freída al momento para un resultado perfecto.
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Uno de los datos más peculiares de esta nueva hamburguesa que llega a México, es que tuvieron que pasar alrededor de dos años para que se convirtiera en una realidad. Mark Rosati, director culinario de Shake Shack, cuenta que tuvieron que pasar por diferentes debates sobre cómo incorporar una opción de proteína que no fuera de res, además de que fue necesario probar distintas versiones hasta llegar al punto exacto de sabor y textura; probaron con pollo asado y frito con harina, hasta que pensaron en poner un poco más de buttermilk para un resultado más crujiente.
Todos los ingredientes que le dan vida a la Chick’n Shack son de la más alta calidad y de origen responsable con el objetivo de seguir cumpliendo la misión de Shake Shack: Stand For Something Good.
Luego de casi una década de la apertura de Shake Shack en Estados Unidos, la llegada de la Chick’n Shack fue algo casi revolucionario, pues por primera vez ofrecían una opción en que la proteína no era de res. En esta ocasión, para su lanzamiento en México, hubo una sorpresa en todos los Shacks. Las primeras 20 personas que llegaron a pedir su orden, obtuvieron una Chick’n Shack gratis, como parte del festejo por la llegada de esta nueva integrante del menú.
La receta podría parecer sencilla, pero la Chick’n Shack tiene más de un secreto por ser descubierto. Afortunadamente ya está disponible en todos los Shacks de la Ciudad de México y puedes acompañarla con alternativas como los frozen custards, las papas clásicas crinkle-cut o quizás con una cerveza artesanal. El resultado será excepcional.