México cuenta con variedad de territorios perfectamente aptos para la producción de vino, y Guanajuato es uno de ellos. Desde años atrás, el estado ha desempeñado una actividad vitivinícola impresionante, consolidado ahora como el cuarto productor de vino en el país. Recientemente descubrimos uno de sus viñedos más especiales, donde no sólo aprender más sobre el proceso detrás de esta maravillosa bebida, sino también disfrutar experiencias enológicas difíciles de encontrar en cualquier otro sitio. Sigue leyendo para conocer más al respecto.
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Guanajuato es el cuarto estado más importante en cuanto a producción vitivinícola en México, y Cuna de Tierra se establece como el primero de 46 proyectos enológicos en su territorio, llevado consigo una historia de tradición familiar y pasión por sus cultivos. Alberga más de 22 variedades de uvas plantadas dentro de un rancho de 126 hectáreas de expansión, y trabaja bajo el compromiso de crear vinos limpios y de poca intervención química.
Cuna de Tierra nació de la amistad entre Don Juan Manchón y Don Ignacio Vega, primero como un proyecto familiar con la adquisición de las primeras plantas de uva provenientes de Parras –Coahuila– en el año de 1993, y posteriormente desarrollado hasta una vinícola de renombre internacional. Su primera producción comercial constó de 3000 botellas en 2005 y, bajo la propuesta de crecer únicamente bajo la demanda del mercado, ahora en 2022 cuenta con una producción de 160 mil botellas de vino al año.
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Su territorio se establece como más que una vinícola, ya que ofrece diversas experiencias didácticas y abiertas al público en general, que a su vez permiten aprender más sobre la cultura enológica de Guanajuato. Una de las más especiales es la de ‘Wine Maker‘, en donde los visitantes disfrutarán un recorrido guiado por sus viñedos, una degustación de quesos y charcutería, y la creación de un ensamble a base de cuatro varietales distintas; aquí no sólo se podrá aprender de primera mano sobre las características principales de algunos vinos de Cuna de Tierra, sino también volver a casa con una botella completamente personalizada.
Cabe destacar que Cuna de Tierra alberga un restaurante de cocina de campo local, con productos cosechados en su territorio y que destacan los ingredientes endémicos de la región. Se recomienda optar por el maridaje recomendado, tanto para potencializar los sabores en cada plato como para degustar un perfil distinto en sus vinos.
