Mansión de Papilio: el hotel boutique de Coyoacán en una casa familiar del siglo XIX

La CDMX es una de esas ciudades que sabe ser una urbe emocionante y un oasis al mismo tiempo, todo depende del plan y el lugar en el que te encuentres. Sin duda, uno de sus mayores encantos es el enorme abanico de posibilidades que despliega tanto para locales como para visitantes. Amamos los hoteles de lujo más emblemáticos en el centro de la ciudad, pero si buscas un cambio de aire, Mansión de Papilio es un pequeño hotel boutique en Coyoacán que te lleva de viaje al pasado con su arquitectura del siglo XIX, sus jardines y su elegancia atemporal.

Una casona antigua en un barrio histórico

La que hoy es un precioso hotel boutique en Coyoacán, hace décadas era una residencia familiar en uno de los barrios más tradicionales de la ciudad. Ubicado a solo unas cuadras de la famosa Casa Azul de Frida Kahlo, Mansión de Papilio ofrece un recorrido por la arquitectura de aquella época, aunque con un estilo un tanto más afrancesado. Hoy por hoy, cuenta con siete habitaciones exclusivas para adultos, un ambiente íntimo y acogedor y jardines exuberantes donde crecen árboles centenarios.

Sin duda, hospedarse en Coyoacán trae múltiples beneficios, sobre todo para quienes desean una estancia distinta y un poco más tranquila. Y es que este barrio —que existía incluso desde antes que la propia ciudad— todavía goza de cierto carácter provinciano, con sus calles empedradas y sus casas coloniales, pero con todas las comodidades de la ciudad. Museos, una excelente y variada oferta gastronómica, edificios históricos, mercados, galerías, boutiques: Coyoacán amerita un viaje exclusivamente para conocerlo a cabalidad.

Siete exclusivas habitaciones

Uno de los grandes encantos de este hotel boutique en Coyoacán es precisamente su atmósfera exclusiva y acogedora, la cual se debe en gran medida a su tamaño. Cada una de las siete habitaciones tiene una identidad propia, con distintas amenidades —como balcones, tinas, jacuzzis, regaderas de mármol y hasta una alberca privada—, de modo que puedes elegir la que más se ajuste a tus planes. La decoración de todas ellas es una oda al estilo afrancesado, con exquisitos tapices, candelabros y grandes ventanales que inundan los cuartos de luz natural.

Experiencias memorables

Si bien por supuesto que recomendamos salir a explorar Coyoacán, Mansión de Papilio ofrece varias experiencias únicas para las que también vale la pena reservarse un tiempo en la agenda. Por ejemplo, cenas privadas frente a la chimenea y con música instrumental en vivo, o un picnic ultra romántico con fondue o pizzas a la leña bajo la sombra de los árboles en el jardín. Para los sibaritas, es posible agendar una cata de vino de la mano de un sommelier en la cava subterránea, con una selección de etiquetas mexicanas, españolas e italianas Finalmente, también se puede programar una noche de cine al aire libre en un teepee gigante en el jardín, ideal para ver tu película favorita en un ambiente único.

¡Viajen, disfruten y compartan!