Ubicado en la calle de Tacuba —mejor conocida como ‘la calle de los perfumes’—, el nuevo Museo del Perfume envuelve a los visitantes en una experiencia inmersiva que consiente a los sentidos y rinde homenaje a la cultura de los aromes y la perfumería en méxico. Y es que aunque comúnmente cuando pensamos en museos lo asociamos casi de manera inconsciente con la vista, la realidad es que los museos son espacios con el potencial de explorarlo todo, incluso lo que no se puede ver, sino olfatear.
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Así como la moda es una de las principales manifestaciones identitarias de una sociedad, las fragancias que elegimos utilizar día con día son una tarjeta de presentación potente que dice mucho sobre nosotros. Por otro lado, la industria de la perfumería abarca mucho más que solo aromas: es el diseño de las botellas y de las etiquetas, son los discursos detrás de cada casa perfumera, la ciencia e investigación requerida para elaborar un olor. Oler ‘bien’ no es una necesidad fisiológica, sino un fenómeno cultural enteramente dedicado al placer de los sentidos y a las convenciones sociales que giran alrededor de ello.
La colección del Museo del Perfume está conformada por más de 4000 objetos relacionados con el ámbito de la perfumería, como envases originales de algunas de las casas perfumeras más antiguas o prestigiosas, botellas cuyas formas y colores dan fe del trabajo de diseño detrás de esta industria, instrumentos de laboratorio utilizados para la elaboración de perfumes y otros objetos de belleza y cuidado personal. Obviamente, el olfato es el invitado principal y, además de todas estas maravillas, también podrás poner a tu nariz a trabajar descubriendo montones de olores y la historia detrás de cada uno de ellos.
Otro de los motivos por los cuales vale la pena conocer el Museo del Perfume es su ubicación, pues aunque la casona en la que se encuentra fue construida a finales del siglo XIX al más puro estilo afrancesado de la época del porfiriato, el predio tiene una historia fascinante. Para empezar, la calle de Tacuba se considera la calle más antigua en el continente americano, pues su traza se remonta a la época de los mexicas, cuando se conocía como Calzada Tlacopan. A lo largo de los siglos vio suceder montones de momentos que determinaron el rumbo del país, y a lo largo de ese proceso, la calle fue adquiriendo una identidad propia.
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A finales del siglo XVIII, en estos terrenos se construyó un hospital para hacer frente a la terrible epidemia de viruela que azotaba a la capital novohispana. Además de su importantísima labor social y sanitaria, el Hospital General de San Andrés fue sede de algunos de los avances de la medicina mexicana más importantes del siglo XIX. A la par de esto, a los alrededores comenzaron a proliferar boticas, ópticas y perfumerías, las cuales permanecerían sobre esta calle incluso después de que cerrara el hospital. Sobre esta calle se pueden encontrar todo tipo de perfumes, desde los más exclusivos hasta fragancias elaboradas en los locales. De hecho, en Tacuba 13 (el local aledaño al museo) se lee el rótulo ‘Perfumes’, de donde se dice que María Félix solía ser cliente frecuente.
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Museo del Perfume
- Dirección: Tacuba 12, Colonia Centro
- Teléfono: 55 5086 4633
- Sitio web: museodelperfume.com.mx