Lo maravilloso de México es que hay destinos para todo tipo de viajeros, desde aquellos que prefieren las experiencias más tradicionales, hasta otros característicos por su atmósfera mística y misteriosa. En Jalisco existe un pequeño poblado legendaria conocido por su relación con lo mágico y enigmático, un tesoro cultural que pocos conocen, pero que sin duda alguna cautiva a aquellos quienes se aventuran a descubrirlo. Hablamos Acatic, un pueblo místico en Jalisco que vale la pena visitar.
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Ubicado en la región Altos Sur en Jalisco, Acatic es uno de los poblados mexicanos que muchas veces se pasan por alto, pero cuyo encanto y atractivo cultural lo hacen digno de visitar. No solo destaca por su impresionante historia, arquitectura colonial y tradiciones locales, sino también por ser un destino donde las brujas y hechiceros deambulan libremente por sus calles empedradas. Lo mejor de todo es que se ubica aproximadamente a una hora de la capital tapatía, por lo que será ideal para recorrer de entrada por salida.
Entre las muchas leyendas de este pueblo místico en Jalisco, existe una que data a un documento del Tribunal de la Santa Inquisición; éste contiene información sobre el juicio contra un mulato llamado Joseph Sebastian, quien se dice tenía un pacto con el Diablo y contaba con poderes especiales. Son muchas las historias similares que le han ganado a Acatic su reputación legendaria, y hasta la fecha se mantiene una fascinación por los seres sobrenaturales, las tradiciones relacionadas con la magia y la brujería.
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Aunado a esto, los alrededores de Acatic ofrecen hermosos paisajes naturales, que a su vez permiten a sus visitantes realizar variedad de experiencias al aire libre y de conexión con la naturaleza. Algunos de sus puntos de interés imperdibles son su Barranca del Río Verde, su Salto de Damian –una preciosa cascada al noreste del municipio–, y su cascada Velo de Novia.
Para aquellos que no puedan visitar un destino sin dejar de lado su propuesta gastronómica, este destino también cuenta con deliciosos platos locales que serán un verdadero festín para el paladar, con especialidades como birria, carne en su jugo y pozole. Definitivamente, una visita a este pueblo místico en Jalisco será una oportunidad de sumergirse en la autenticidad de la cultura mexicana, descubriendo una serie de experiencias que van desde lo misterioso hasta lo más tradicional.