México tiene un enorme legado artesanal que encuentra distintas expresiones, estéticas y tradiciones de una punta a la otra del país. Todos los estados tienen sus propias artesanías representativas, desde textiles hasta vajillas de cerámica y objetos de metal. Un gran plan a largo plazo para los amantes de la cultura es recorrer todos los pueblos artesanos de México, pero como esa misión probablemente requeriría de varios años de viaje, podemos fragmentarlo por estados y poco a poco ir haciéndonos de una colección de las maravillas de nuestro país. Estos son seis pueblos en Michoacán ideales para ir a comprar artesanías.
¡Viajen, disfruten y compartan!
Santa Clara del Cobre
Desde tiempos purépechas, lo que hoy es Santa Clara del Cobre ha sido hogar de una comunidad orfebre dedicada al perfeccionamiento de la técnica del martillado, la cual implica fuerza, precisión y trabajo en equipo para forjar piezas únicas. Este es uno de los pueblos más famosos para comprar artesanías en Michoacán, pues a lo largo de todo el año se pueden visitar los talleres familiares donde se elaboran sin parar cazuelas, joyería y otros elementos utilitarios y decorativos hechos de cobre. Por otro lado, durante los últimos días de julio se realiza la Feria Nacional del Cobre, una exhibición artesanal que reúne una muestra considerable de los maestros artesanos de la región.
Capula
Si eres amante empedernido de las vajillas mexicanas, entonces seguramente ya conoces (y deseas fervientemente) la cerámica de Capula. En realidad, este pueblo en Michoacán ya es parte de la ciudad de Morelia, así que vale la pena completar un recorrido por el Centro Histórico de la capital del estado con una visita a este barrio a solo media hora de distancia. Además de las clásicas lozas de barro decoradas con la técnica de ‘capulineado’ —es decir, cuidadosos patrones que se conforman de minúsculos y precisos puntos—, este lugar es famoso por sus catrinas de barro, las cuales se venden particularmente durante las fechas del Día de Muertos.
Ocumicho
Ocumicho es otro de los pueblos en Michoacán cuya herencia purépecha se hace presente a través de sus artesanías. Aquí las piezas más famosas son los diablos de barro policromado, cuya imaginería es el resultado del sincretismo que resultó del encuentro de las culturas prehispánicas y la española. Aunque estos demonios son el gran referente del pueblo en el panorama mundial, todos ellos se elaboran a mano y ninguno es exactamente igual, además de que también es posible encontrar otras figuras como alebrijes, carritos y muñecas.
San José de Gracia
Sin duda, una de las artesanías mexicanas más elegantes y conocidas a nivel internacional son las piñas de barro vidriado de San José de Gracia. Estas piezas denotan el más extremo cuidado y un dominio de la técnica que se hace presente en cada detalle, pero aunque los procesos son milenarios y fueron utilizados por culturas alrededor de todo el mundo, el diseño estilizado de las piñas nació hace apenas algunas décadas en el taller de la señora Elisa Madrigal Martínez. Hoy en día, se realizan en varios talleres familiares de este y algunos otros pueblos, y se trabaja principalmente con cuatro colores: verde, azul, amarillo y café.
Pátzcuaro
La plata es uno de los materiales que marcaron la historia de México desde la llegada de los conquistadores españoles. Hasta el día de hoy, en Pátzcuaro se fabrica platería artesanal a partir de la alforja, la cual permite manejar grabados mucho más detallados. El diseño más típico de este pueblo en Michoacán a orillas del lago son los peces de plata, trabajados con sumo cuidado para trazar cada escama y confeccionar los collares, pulseras y aretes más lindos. Esta técnica es el orgullo de artesanos y diseñadores como Willy García, quien a pesar de tener un catálogo bastísimo de las piezas más espectaculares, no deja de guardar un rincón especial en su producción para estos peces.
Uruapan
Si quieres comprar artesanías mexicanas auténticas y directamente de la mano de los artesanos, entonces no te puedes perder el Tianguis de Artesanías de Uruapan, que se lleva a cabo a finales de mayo y principios de abril. Aunque aquí participan expositores de todo el estado, vale la pena detenernos a hablar sobre las artesanías que se fabrican en este pueblo en específico. No es sorpresa que el ecosistema boscoso de Michoacán se traduzca en preciosas artesanías de madera tallada y trabajada con maque y lacas, resultando así increíbles cajas, biombos, guajes y charolas de motivos florales de diseños florales muy coloridos.
