Así como los bosques y las playas destacan por su sorprendente belleza natural, los desiertos también ofrecen paisajes de ensueño que permiten apreciar la magnificencia del planeta tierra, con una riqueza biológica maravillosa y digna de conocer. Algunos de ellos se encuentran en México, albergando destinos característicos por su atractivo histórico y tradicional; su tú también quieres conocerlos y planear tus próximas vacaciones a un destino distinto, aquí te compartimos algunos Pueblos Mágicos en el desierto mexicano que tienes que agregar a tu lista de viajes.
¡Viajen, disfruten y compartan!
Real de Catorce
Ubicado en San Luis Potosí, Real de Catorce es uno de los Pueblos Mágicos en el desierto de México donde disfrutar una experiencia llena de cultura y tradición. Destaca por sus maravillosos paisajes inmersos en el desierto de Wirikuta, que puede conocerse a través de un recorrido a caballo o una excursión de camping, y que sin duda alguna ofrecerá panoramas inolvidables. Otras paradas obligadas en este pueblo fantasma son su Parroquia de la Purísima Concepción y su Túnel de Ogarrio.
Parras de la Fuente
Este es uno de los Pueblos Mágicos en el desierto mexicano donde disfrutar una visita de tradición vinícola y atractivo arquitectónico, al igual que maravillarse con gran parte de la riqueza cultural en el estado de Coahuila. Abunda en viñedos, nogales y calles históricas, que serán escenarios perfectos para consentirse con experiencias enológicas –recomendamos visitar Casa Madero y Viñedos Don Leo— y recorridos de auténtica belleza natural.
Mapimí
Mapimí se conoce como el primer Pueblo Mágico de Durango, un precioso destino envuelto en el semidesierto mexicano que no sólo destaca por la imponencia de sus paisajes naturales, sino también por su maravillosa historia minera. Ésta se puede apreciar todavía a través de algunos de sus puntos de interés cultural, como lo son su Mina de Santa Rita y Mina de Ojuela –que alberga una tirolesa perfecta para quienes disfruten las experiencias de aventura–; recomendamos conocer su Plaza de Armas, Iglesia de Santiago Apóstol, Museo Benito Juárez y Callejón de las Flores.
Tula
Este maravilloso destino se considera el Pueblo Mágico más antiguo de Tamaulipas, un sitio cuyos escenarios naturales ofrecen un punto de encuentro entre el desierto y el bosque mexicano, resultando en paisajes de ensueño y dignos de conocer. Se le conoce también como la cuna de la cuera tamaulipeca –una preciosa chaqueta decorada de bordados tradicionales–, así como por albergar más de 400 construcciones cuya historia data de los siglos XVIII y XIX.
Mineral de Pozos
A Mineral de Pozos también se le considera como un pueblo fantasma, esto debido a que ha sido abandonado dos veces desde su fundación, y a que se ubica en medio de una zona semidesértica de México. A pesar de ello, es un destino de importante atractivo cultural, con variedad de vestigios mineros, exquisita gastronomía local, construcciones clásicas y paisajes naturales de ensueño.
Candela
Candela es uno de los Pueblos Mágicos en el desierto de México que permite apreciar la riqueza cultural de Coahuila. Muchos años atrás, su territorio fue punto clave en las batallas revolucionarias de Venustiano Carranza, y ahora puede visitarse para conocer parte de su patrimonio histórico en cada uno de sus rincones; vale la pena consentirse en sus aguas termales de Ojo Caliente, así como conocer su Arroyo El Zapote, Cueva de los Murciélagos, Grutas El Carrizal y Presa de las Higueras.
Cuatro Ciénegas
Cuatro Ciénegas es uno de los destinos más especiales de Coahuila, al igual que uno de los Pueblos Mágicos en el desierto mexicano donde maravillarse con algunos de los escenarios más biodiversos del mundo. Su valle cuenta con reconocimiento internacional gracias a su carácter biológico, con suelos yesosos y depósitos naturales de agua que han servido de apoyo para investigaciones científicas sobre el origen de la vida. Visitarlo sin duda será una experiencia espectacular.
