Ver las hojas caer mientras los paisajes se pintan de naranja es hermoso, y como seguramente sabes, el otoño no ha terminado. Así que, ¿qué te parecería un buen maridaje mientras observas ese bello cuadro? Pues los vinos de La Rioja y el restaurante Jaso en Polanco nos ofrecieron un menú que combinaba los sabores de Thanksgiving con una deliciosa cata. Aquí te contamos los detalles de lo que probamos.
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Para comenzar, llegó a la mesa una deliciosa Sopa de Butternut Squash, cremosa y con un sabor suave al inicio. La acompañamos con un vino rosado Marqués de Riscal, delicado y refinado para un platillo como este.
Los que se llevaron la estrellita Food and Pleasure en esta ocasión fueron loas Ravioles Rellenos de Calabaza con salsa de mantequilla, almendras y manzana. Eran suaves y llenos de sabor. Para maridarlos, nos sirvieron un Monopole Clásico Blanco, el cual puedes encontrar en lugares como Palacio de Hierro y Liverpool.
Cuando creíamos que habíamos llegado al clímax de nuestra comida, llegó un Pavo Cocido en Alto Vacío, con stuffing de pan de elote, puré de papa, camote y gravy, ¿ya se te antojó? Pues espéra, porque lo mejor fue que lo combinamos con un delicioso vino Orben de uva tempranillo.
Por último, la parte que más nos gusta a muchos de nosotros y con la que no nos podemos quedar con las ganas es el postre, y para esta ocasión nos sirvieron un increíble Pudín de Pumking, con gales de arándano y calabaza en tacha que resultó el maridaje perfecto para un Viña Ardanza, con el cual el sabor se tornó perfecto para nuestro paladar.
Al final, nos pudimos percatar que la calabaza y el vino se han vuelto nuestros complementos favoritos para pasar una temporada otoñal de ensueño. Además, si es un Rioja, tendremos por seguro que beberemos tradición, historia, y sabor en cada trago.
¡Coman, disfruten y compartan!