Cuenta la leyenda Maya que el final de la tierra vendrá cuando los jaguares asciendan del inframundo con el objetivo de devorar el sol, la luna y prácticamente todo lo que conocemos. Para esta enigmática cultura, el jaguar –denominado Balaam– era símbolo de poder y autoridad ante la sociedad, además de que solía ser relacionado tanto con la luz como con la oscuridad.
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Dicho felino es sin duda uno de los pilares de la cultura mexicana, y ¿qué mejor que representar la fusión del México contemporáneo con lo artesanal y lo tradicional a través de un mezcal que descansa dentro de una preciosa cabeza de jaguar?
Parecería demasiado bueno para ser verdad, una pieza de colección que resguarda el destilado más entrañable de la nación. Así nació Mitre, una etiqueta que trabaja con los Maestros Mezcaleros Don Tacho y su hijo Joel Santiago, quienes operan con un modelo vertical integral que abarca desde el cultivo del agave hasta el envasado, dando como resultado un producto de primera calidad.
«El primer paso es seleccionar los magueyes maduros de especie Espadín, que tardan
entre 6 y 8 años en madurar desde su siembra, todos sembrados en el estado de Oaxaca y
destinados a producir los aromas primarios del producto», asegura la marca.
Después de limpiar los corazones o piñas del agave, se transportan a Santiago Mazatlán, uno de los siete municipios de la «región del mezcal». Ahí son cocidas durante tres días en un horno de piedra volcánica en donde se agrega agua a las piedras calientes para lograr un toque ahumado, ligero en comparación con otros mezcales.
Una vez que se extrae el mosto y el bagazo, pasan a fermentar de forma natural a tinas de madera de pino, para que en cuanto las levaduras consuman los azúcares, se pueda proceder a la primera destilación en alambique de cobre.
«El resultado de la primera destilación pasa a una segunda, la cual se conoce como rectificación, y aquí es donde se hace el corte de cabezas, cuerpo y colas. Este cuerpo que se obtuvo tiene que madurar durante cuatro meses para poder estar listo para ser envasado a mano en nuestras licoreras de jaguar.»
El resultado es espléndido, casi divino. Con un toque ahumado delicado que irradia elegancia, este mezcal de categoría Artesanal de Clase Blanco o Joven, 100% Maguey Espadín a 40° Alc. Vol. es increíblemente suave, enriquecido en aroma con notas cítricas, con sabores balanceados que lo vuelven ideal para disfrutarse por sí solo o combinado con las más espectaculares creaciones de mixología.
Al estar envasado dentro de una hermosa cabeza de jaguar, es la botella obligatoria que tendrás que tener en la barra o expuesta dentro de una vitrina en tu hogar. Cuando algún amigo o visita te pregunte por esta belleza, solo hará falta que le sirvas un trago y Mitre hablará por sí solo. Una bebida que expresa tradición, elegancia y sofisticación desde el interior hasta el exterior.
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