A tan solo 54 kilómetros o más bien, a una hora del centro de Mérida, se localiza un hermoso pueblo pesquero que alberga hermosas playas de arena blanca y aguas turquesas. Se trata de Sisal, el Pueblo Mágico de Yucatán que se unió a este programa desde hace aproximadamente cuatro años y que además le suma a sus encantos el estar situada dentro de la Reserva Estatal El Palmar, un sitio RAMSAR, que protege los humedales y sus recursos.
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Durante la época colonial, Sisal fue uno de los centros comerciales y políticos más importantes de México. Ahí se comercializaron fibras de henequén, algodón y tabaco que eran enviados hacia el viejo continente. Sin embargo, con la edificación de Puerto Progreso, este sitio perdió relevancia en ese ámbito, pero ganó fuerza al ser una reserva natural importante, la cual ha sido el hogar de los flamingos rosas, playas paradisíacas, manglares y arrecifes.
Por qué Sisal no quería ser Pueblo Mágico
En el año 2020, Sisal fue nombrado el séptimo Pueblo Mágico de Yucatán, compartiendo dicho nombramiento con Valladolid, Izamal, Maní, entre otros. Sin embargo, lejos de que está noticia alegrara a sus habitantes, trajo un gran descontento en la población. ¿La razón? Al ser catalogado como ‘Pueblo Mágico’, el destino atrae la atención del turismo y, aunque esa es precisamente la intención de este programa de la Secretaría de Turismo, costearse la vida ahí se vuelve imposible.
De acuerdo con las palabras de sus habitantes, los costos de vida han incrementado desde dicho nombramiento. Se están privatizando las playas y los pobladores ya no pueden caminar sobre la arena blanca tranquilamente. Asimismo, la obra ha llegado desde afuera, evitando el flujo de trabajo entre los locales. Los terrenos y los predios están subiendo de precio y solo unos cuantos pueden costearlos.
Qué ver en Sisal, el Pueblo Mágico de Yucatán
Aunque esta noticia es buena para el turismo mexicano y un tanto decepcionante para sus habitantes, lo que sí es un hecho es que este destino tiene mucho qué ofrecer. Vale la pena recorrer el Muelle de Sisal, el Fuerte de Santiago y su Faro, la Ex Aduana Marítima, La Casa de la Emperatriz Carlota y hacer un recorrido por sus manglares y la Reserva Estatal El Palmar para avistar cocodrilos y los flamingos rosas, muy característicos de esta región. O bien, nadar en sus playas de arena blanca y agua cristalina.
Dónde hospedarse en Sisal
Debido a su nombramiento como Pueblo Mágico, Sisal se ha visto enriquecido de pequeños alojamientos. Uno bueno, bonito y barato es Agua de Ciénega, un hotel boutique en Yucatán, cuyo concepto está enfocado en recibir solo adultos. Cuenta con habitaciones, suites y master suites de diseño moderno y elementos locales. También ofrece una terraza, zona de picnic y piscina al aire libre, al igual que experiencias como cabalgatas, cenas románticas y hasta masajes relajantes.
Qué comer en este Pueblo Mágico
Se sabe que la gastronomía yucateca es una de las más ricas y variadas de todo México. Vale la pena probar los panuchos o la cochinita pibil. Y como Sisal es un Pueblo Mágico playero, ahí también se puede disfrutar de pescados y mariscos frescos. Entre los platos más populares se encuentran el carpaccio de caracol, pulpo frito y manos de cangrejo.
