Si eres de los que ama el comfort food este lugar sin duda, será tu nuevo ‘happy place’. Este proyecto del chef Klaus Albert es uno de los más populares a tan solo unos meses de apertura, y no es para menos pues este joven cocinero lleva una trayectoria que pocos tienen; ha trabajado en restaurantes tan aclamados como The French Laundry y El Celler De Can Roca. Anónimo es ese lugar al que puedes ir a cenar en pareja o con amigos y pasarla increíble.
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Ubicado en la colonia Condesa, Anónimo restaurante basa su encanto en la sencillez de sus platillos y en la buena onda que refleja su personal. Comida honesta, sustanciosa y apapachadora que nos muestra la versatilidad del chef. El espacio también tiene un toque elegante y moderno con una increíble barra que deja ver el trabajo detrás de cada orden. Para nosotros esa barra sería el lugar obligado porque así puedes ver todo el movimiento de los cocineros, además de tener las fotos más increíbles.
Cocina italiana casual con un toque personal del chef es lo que encontrarás en este espacio lleno de apapacho y mucho flow. Te recomendamos probar su capeletti relleno de berenjena quemada con pan de masa madre; los ñoquis con huitlacoche y maíz cacahuazintle salteado en mantequilla marrón son parte de un menú lleno de creatividad que estamos seguros te dejará con un buen sabor de boca. Anónimo es el restaurante al que debes ir para consentirte y dejarte apapachar.
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En la barra también encontrarás vinos naturales y cocteles coquetos como el ‘Yellow bird’, además de cervezas artesanales y otras sorpresas. Anónimo es el spot obligado para esos amantes de la cocina italiana que buscan algo clásico con el toque divertido y alocado del chef Klaus. Otro imperdible es el raviolo relleno de ricotta y yema de huevo, el cual se sirve con un glaseado de ternera que te hará querer limpiar el plato. No dejes de visitarlos y platicarnos tu experiencia.
Para finalizar no podían faltar los postres y acá están a otro nivel. Imagina una tarta con cebolla quemada, pues el chef creó una tarta de cereza con pistachos y cebolla quemada; sabores que no estamos acostumbrados a probar pero que funcionan a la perfección. También tiene una copa de genoise remojada en Grand Marnier con chutney de piña, caramelo salado y nueces confitadas que te va a volar la cabeza. Estamos seguros que visitarás muy seguido este restaurante, el cual ya es de nuestros favoritos.
