La ciudad de Guanajuato es un destino plagado de historia, gastronomía, arte y cultura, con imponentes edificios coloniales y pintorescas plazas a lo largo de sus calles, donde todos sus callejones cuentan una historia y a cada esquina aguarda un rincón mágico que te roba el aliento. La Casa del Rector es un hotel boutique de lujo en el Centro Histórico ubicado en un edificio virreinal cuya fachada neoclásica recibe a los huéspedes para vivir una experiencia única sumergidos en toda la esencia de esta magnífica ciudad.
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A lo largo de sus múltiples espacios exteriores, La Casa del Rector rinde homenaje a la historia y riqueza de Guanajuato, rescatando los elementos arquitectónicos característicos del inmueble —uno de los más antiguos de la ciudad—, en los cuales se cuenta la fascinante historia del edificio. En esta casona del siglo XIX habitó el general Florencio Antillón, quien pasó a la historia por el papel que jugó en la emblemática Batalla de Puebla, junto al general Ignacio Zaragoza. Posteriormente, la casa fue ocupada por el coronel Joaquín Obregón González, el primer gobernador oficial del estado —cuyas iniciales se conservan todavía en algunos detalles de la herrería—. Finalmente, durante casi 50 años, este fue el hogar de Armando Olivares Carrillo, fundador y primer rector de la Universidad de Guanajuato.
Cada una de las 13 habitaciones de este hotel recrea el esplendor y la elegancia de aquella época en la que personajes ilustres iban y venían por los corredores de esta casona. Además de las camas mullidas plagadas de almohadones y los tapetes persas con patrones fastuosos, el arte es uno de los elementos fundamentales que dotan de vida y personalidad a La Casa del Rector. Tanto las pinturas que cuelgan de cada uno de los muros hasta las esculturas que habitan los patios y nichos en las escaleras son una muestra del trabajo de los grandes artistas mexicanos contemporáneos digna de detenerse a contemplarlas.
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En La Casa del Rector no solo se busca estimular el intelecto, sino también —y sobre todo— los sentidos. Para esto, cuentan con tres propuestas gastronómicas espectaculares y variadas. En primer lugar, Panadería 33 recibe cada mañana con el aroma del pan y el café recién hechos. Desde hogazas de pan de masa madre hasta conchas y roles de canela, aquí encontrarás un rinconcito muy acogedor para bienvenir el día o pasar la tarde.
Por otro lado, el restaurante Las Vieyras presenta un menú de comida honesta y reconfortante para disfrutar una tarde apacible después —o antes— de una ardua caminata por los callejones de Guanajuato. Su espacio cálido se distribuye a través de uno de los patios centrales del hotel, ofreciendo una atmósfera repleta de plantas y detalles en piedra y madera que invitan a desconectarse del mundo cotidiano para fundirse en las sillas, compartir un trago y pasar una larga sobremesa.
Finalmente, ninguna estancia en La Casa del Rector estaría completa sin contemplar el atardecer desde Bartola Sky Bar, un ‘rooftop’ con vistas privilegiadas hacia las calles principales y los pintorescos callejones de Guanajuato, así como los cerros que circundan la ciudad. Desde aquí podrás pedir un trago creativo y pasar la tarde con tus amigxs o pareja mientras admiran cómo el cielo se tiñe de mil colores y las estrellas comienzan a abrirse paso entre las sombras.
¡Viajen, disfruten y compartan!