¿Cuántas veces has planeado ir a la playa para relajarte y, sin embargo, eso no sucede? Seguramente te pasa constantemente y no es que estés haciendo algo mal, simplemente estás eligiendo el lugar incorrecto. Aunque alrededor de la República Mexicana existen un sinfín de playas paradisíacas, muchas de estás ya son muy concurridas. Tal es el caso de Acapulco o Balandra; no obstante, existe una en particular que casi nadie visita y es la playa El Cuyo.
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El Cuyo, un pueblo pesquero
La playa El Cuyo se localiza en el Golfo de México, precisamente en la costa yucateca, en la reserva Ría Lagartas, entre Holbox y La Colorada. De Mérida se encuentra a 261 kilómetros, más o menos a 3 horas y media de distancia. Sin embargo, del Pueblo Mágico de Valladolid solo está a 2 horas y 17 minutos, y de Cancún, a dos horas y media, aunque puede ser menos dependiendo del tráfico. El Cuyo está catalogado como un pueblo pesquero y opera como puerto maderero desde hace varios años.
Un paraíso natural yucateco
Cuando llegues a la playa El Cuyo, descubrirás un pueblito rústico con casas de madera o de cemento con techos de láminas. Caminarás por calles de terracería o, mejor dicho, de arena fina, además de enormes palmeras haciendo sombra. Al llegar a la orilla del mar, descubrirás una hermosa playa de agua turquesa con arena blanca y suave y un cielo divino que hace contraste con el océano.
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La playa El Cuyo: el hogar de flamencos
La playa El Cuyo también es el hogar de los flamencos, quienes emigran en busca de zonas mucho más cálidas. y si tienes suerte, podrás avistarlos. Las tortugas marinas también llegan ahí para poner sus huevos. Un dato importante que tienes que saber es que en este pueblo pesquero no existen grandes hoteles, ni mucho menos centros comerciales. En este sitio la vida es sencilla y muy tranquila, aunque sí encontrarás alojamientos para pasar la noche.
Los lugareños tienen sus propios establecimientos donde puedes encontrar productos de necesidades básicas y también comida. Vale la pena que disfrutes de los pescados y mariscos frescos de la región. Prueba la comida típica yucateca y disfruta de unos ricos tacos de cochinita pibil o panuchos. No olvides disfrutar del mar, sobre todo porque puedes realizar actividades acuáticas como kayak y paddle board.
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